Su llegada ha servido para paliar la acelerada reducción de la población autóctona en la comunidad autónoma vasca Su llegada ha servido para paliar la acelerada reducción de la población autóctona en la comunidad autónoma vasca

Varios inmigrantes africanos viajan a bordo de un autobús.Foto: antonio olza

vitoria. La inmigración es, cada día con mayor rapidez, un fenómeno social imparable. A lo largo de los dos últimos años, el volumen de residentes extranjeros en Álava ha crecido un 27% al pasar de 12.058 en 2004 a 16.324 personas en 2006. La provincia vasca en la que más se ha dejado sentir el empuje del movimiento migratorio ha sido, de acuerdo con los datos ofrecidos por el Observatorio Vasco de Inmigración, Bizkaia, con un incremento del 33% entre 2004 y 2006, año este último en el que se han registrado 42.707 extranjeros residentes en el territorio. Gipuzkoa se sitúa en el vagón de cola de la CAPV, con una tasa de crecimiento migratorio del 26% y 24.516 extranjeros contabilizados en la provincia.

Al dibujar una panorámica global de Euskadi, los responsables del observatorio señalan que, entre 2004 y 2006, el volumen de población extranjera empadronada en la comunidad “ha aumentado significativamente”. “En 2004 residían en el País Vasco 59.166 inmigrantes, mientras que a 1 de enero de 2006 la cifra asciende a 83.547 personas, es decir, que se ha incrementado en un 41%”. Este espectacular crecimiento ha provocado, además, que la CAPV haya sido la comunidad autónoma que experimentase, en 2005, la mayor variación interanual de población extranjera del Estado, con un aumento del 14%.

La llegada de extranjeros a la CAPV ha servido para paliar la cada vez más rápida reducción de la población autóctona, que a lo largo de los últimos ocho años se ha traducido en la desaparición de 35.829 personas. Gracias al fenómeno migratorio, en términos absolutos la población vasca ha aumentado en 35.520 habitantes entre 1998 y 2006 debido a la aparición de 68.349 ciudadanos de distintas nacionalidades en este mismo periodo.

Aunque Bizkaia es la provincia en la que está empadronado un mayor número de inmigrantes, es Álava el territorio en el que los extranjeros constituyen un mayor porcentaje dentro de su población, con un 5,5%. En Gipuzkoa el índice asciende al 3,4% y en Bizkaia al 3,9%.

En atención al sexo de los inmigrantes que llegan a la CAPV, la situación es de casi completo equilibrio. El 50,8% son hombres y el 49,2% mujeres, aunque si se observa el fenómeno desglosado por territorios se detectan ciertas diferencias. En Álava existe una mayor presencia masculina – 54% – frente a la femenina – 46% – , al igual que en Gipuzkoa, donde los varones inmigrantes suman el 51,6% del total.

En Bizkaia, curiosamente, se produce la tendencia inversa y las mujeres son mayoría al representar el 50,8% de los extranjeros residentes. Los responsables del Observatorio Vasco de Inmigración explican esta diferencia por la mayor presencia de población latinoamericana en el territorio.