madrid. El ministro de Defensa, José Antonio Alonso, reveló ayer que los trabajos del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) han permitido, en los últimos seis meses, desarticular 15 redes de mafias de inmigración ilegal e interceptar cerca de 150 embarcaciones, con unos 7.500 inmigrantes ilegales.

El titular de Defensa destacó el trabajo de los servicios de inteligencia españoles desplegados en los países ribereños africanos del Atlántico, que desde el pasado mes de mayo han redoblado sus recursos, tanto personales como financieros.

La información obtenida por el CNI ha facilitado la identificación de numerosos miembros de redes de tráfico de personas, que ha sido trasladada fundamentalmente a los servicios de Marruecos, Mauritania y Senegal y se han producido numerosas detenciones y desarticulaciones en esos países.

Gracias a la información facilitada por el CNI, según Defensa, en Mauritania han sido desarticuladas 11 redes, una de ellas gambiana, otra senegalesa y otra asiática, con 45 detenidos.

En Senegal han sido desarticuladas dos redes, con diez personas detenidas, y en Marruecos otras dos redes, con un número indeterminado de detenidos.

También se han producido detenciones en Argelia, Mauritania, Gambia y Guinea Bissau.

En sus actuaciones dentro del Plan África , puesto en marcha por el Gobierno, el CNI ha abierto nuevas delegaciones en Mali, Nigeria y Sudáfrica, ha doblado el número de agentes en Mauritania y los ha triplicado en Senegal.

mayor control El Gobierno ha establecido o intensificado relaciones con los servicios de inteligencia con Marruecos, Argelia, Libia, Mauritania, Senegal, Mali, Gambia, Costa de Marfil, Nigeria y Sudáfrica, y trabaja en la misma línea con Cabo Verde y Guinea.

Defensa subrayó que las fuentes del CNI han permitido un mayor control de las concentraciones de inmigrantes cerca de las zonas fronterizas de Ceuta y Melilla, detectándose asimismo con antelación algunos intentos de asalto a las vallas de separación con el territorio marroquí. >agencias