AUNQUE EL COLECTIVO de inmigrantes se ha convertido en una pieza esencial del funcionamiento del mercado laboral, el número de ocupados extranjeros que desempeñan un empleo legal en la Comunidad Autónoma vasca es de sólo el 6% del total de trabajadores. Según datos recogidos por el Grupo Adecco durante el primer semestre del año, apenas seis de cada cien trabajadores de la CAV cuentan con un contrato legal. Dicho informe pone de manifiesto que el número de inmigrantes con un trabajo regularizado supone alrededor de 57.000 en una población ocupada de casi 950.000 personas. Hay que hacer notar que la población inmigrante con papeles en la CAV ronda los 70.000.

La contratación de inmigrantes está fomentando además dolorosas picarescas como demuestra el proceso judicial abierto tras conocerse este mismo viernes la detención de cincuenta personas en Albacete y Cuenca que fomentaban la inmigración ilegal de trabajadores marroquíes, a quienes cobraban hasta nueve mil euros por una falsa oferta de trabajo.

Bizkaia es el territorio que más inmigrantes contrató durante los seis primeros meses del año, más de la mitad del total. Araba, con el 28,9%, se sitúa en segunda posición y también pierde peso frente al guarismo anterior del 32%. Gipuzkoa es el que menos inmigrantes contrata de los tres territorios, con el 20,6%, pero es el único que ha ganado peso en la contratación, más de ocho puntos porcentuales. No obstante, el número de extranjeros empleados en la CAV ha experimentado un incremento interanual de tan sólo un 3,5%, frente al 31,57% de la media estatal. El varón subsahariano sin estudios se consolida como el perfil del inmigrante en la CAV, frente al sudamericano en el resto del Estado.

Por debajo de la media

Otro dato significativo de la escasa ‘‘representación laboral’’ de los inmigrantes es que la CAV emplea al 2,05% de los extranjeros que trabajan en el Estado español, frente al 32,45% que aglutina Cataluña o al 26,59% de Madrid. Así, sigue siendo una de las comunidades que menos demanda la contratación de inmigrantes.

La operación mediante la cual se desarticuló una red que fomentaba la inmigración ilegal en Castilla-La Mancha es algo residual pero no excepción. Así lo anunció ayer el secretario de UGT, Carlos Pedrosa, quien precisó que este sindicato se personará en el proceso judicial abierto para conseguir que los quinientos estafados «obtengan el permiso de residencia por condiciones excepcionales y puedan trabajar aquí». El secretario regional de UGT añadió que fueron precisamente las denuncias de algunos trabajadores inmigrantes ante este sindicato los que alertaron de que se les estaba cobrando hasta nueve mil euros por una oferta laboral en Villarrobledo. Los extranjeros afectados denunciaron estas prácticas el pasado mes de enero, cuando se inició la investigación policial .

Subsaharianos en la CAV

Hay que hacer notar que el perfil del inmigrante contratado por Adecco en la CAV no coincide con el del Estado, que es el de un varón iberoamericano. En la CAV la situación es diferente, ya que el perfil mayoritario es el de un hombre subsahariano de entre 26 y 35 años, con estudios elementales que trabaja en el sector industrial. Este perfil se repite y consolida con respecto al del año pasado, frente a la tendencia del resto del Estado. De hecho, más del 40% de los inmigrantes que han llegado a la CAV son subsaharianos.

Respecto a los puestos de trabajo ocupados por inmigrantes, en Hegoalde, al igual que en el resto del Estado español, los puestos más demandados son los de producción, que además han aumentado más de cinco puntos porcentuales, hasta el 80,31%, por encima de la media estatal (68,34%). La siguiente categoría laboral que más inmigrantes emplea es la de ventas y comercio, un 9,85%, por encima del resto del Estado, donde un 7,4% de los inmigrantes trabaja en este sector. Sin embargo, en la hostelería y la restauración ha bajado menos de un punto porcentual, hasta el 4,62%, alejándose aún más de la media estatal (15,6%).

Los puestos que requieren mayor cualificación han caído como consecuencia del descenso de la formación de los inmigrantes, tal y como ha sucedido en el conjunto estatal. Así, los puestos administrativos se han reducido de una manera importante a un 1,85%, frente al 4% que suponían en el primer semestre de 2005 y al 5% del Estado.

Lo mismo ha ocurrido con los perfiles técnicos u oficios, cuya contratación de inmigrantes se ha reducido en caso ocho puntos porcentuales, hasta el 3,08%.

Aunque la CAV sigue la tónica estatal, los trabajadores con estudios elementales han sufrido un importante descenso en el primer semestre de 2006 con respecto al mismo periodo del año anterior, pasando del 77% al 60,37% actual. Sin embargo, los trabajadores con estudios de bachillerato han visto cómo su presencia se incrementaba en más de 15 puntos porcentuales hasta situarse en el 24,77% a costa de los trabajadores con estudios elementales. Se aprecia también una ligera caída del porcentaje de trabajadores con formación universitaria, que han pasado de representar el 11% en los seis primeros meses de 2005 al 9,6% un año después. Pese a ello, el porcentaje es sensiblemente superior a la media estatal, situada en el 8,22%. Por último, los trabajadores extranjeros con formación técnica, ya sea media o superior, sufren ligeros incrementos interanuales hasta representar el 5,27% del total frente al 3% de doce meses antes y al 2,68% de la media estatal.

Más de la mitad de los inmigrantes que buscan empleo en la CAV son jóvenes de entre 26 y 35 años. La edad media del extranjero sigue siendo un lustro mayor que la del estatal, al menos en los casos contratados por Adecco, entendiendo como lógica esta mayor madurez debido al tiempo necesitado para el traslado desde sus países de origen.