?arias asociaciones de musulmanes residentes en Holanda han expresado su rechazo al proyecto de ley aprobado por el Gobierno para prohibir el uso del burka o de cualquier tipo de velo que cubra la cara.


El Ejecutivo considera que el uso de este tipo de atuendos perturba el orden público y la seguridad. La proposición incluye el veto al uso del burka en calles, colegios, juzgados, trenes y autobuses en todo el territorio holandés.


La principal organización musulmana en el país, la CMO, asegura que el proyecto es «una reacción desmesurada a un problema realmente marginal».


La propuesta fue hecha por la discutida ministra de Integración, Rita Verdonk, cuya rigidez al intentar quitar la nacionalidad holandesa a la ex diputada de origen somalí Ayaan Hirsi Ali causó la crisis de Gobierno que desembocó en las elecciones generales anticipadas que se celebrarán el próximo miércoles.


La integración de los inmigrantes, especialmente los musulmanes, y el modelo económico nacional se han convertido en los ejes de las distintas campañas, mientras que la fuerte división política hace difícil la formación de una coalición de Gobierno.


Las encuestas predicen que ningún partido logrará alcanzar la mayoría absoluta.