La Policía Nacional ha detenido en Villarrobledo (Albacete) y San Clemente (Cuenca) a 50 personas –37 empresarios españoles y 13 intermediarios marroquíes– como presuntos integrantes de una red dedicada a favorecer la inmigración irregular en España.


Según informó ayer la Subdelegación del Gobierno en Albacete, esta organización podría haber obtenido un beneficio económico cercano a los cuatro millones y medio de euros mediante el engaño a unos 500 inmigrantes marroquíes.


La operación policial se inició hace siete meses y culminó ayer con el registro de tres gestorías de Villarrobledo y una de San Clemente, además de varios domicilios en el primer pueblo y en Minaya (Albacete), donde fueron detenidos cuatro miembros de una misma familia y que son considerados cabecillas de la red. En uno de los registros efectuados en una gestoría de Villarrobledo fue detenido su propietario como presunto cerebro de esta organización.


Vendían sus propiedades

La banda desarticulada captaba a los inmigrantes en los poblados más humildes de Marruecos. En muchos casos se veían obligados a vender todas sus propiedades o a hipotecar sus viviendas para abonar los 9.000 euros que se les exigía a cambio de una supuesta oferta de trabajo.


Los empresarios españoles detenidos –propietarios agrícolas en su mayoría– realizaban las ofertas de trabajo a cambio de cobrar comisiones de entre 1.200 y 4.800 euros por los contratos falsos. De esta forma, los extanjeros obtenían un permiso laboral y su alta en la Seguridad Social, cuyo coste ellos mismos debían sufragar, aunque al final se encontraban con que no había para ellos ningún empleo disponible.


Los 13 intermediarios arrestados eran los encargados de captar a las víctimas en Marruecos, de organizar los viajes a España y de realizar los trámites en nuestro país para obtener los permisos de residencia de los inmigrantes.