C. Pérez

Las palmas – Aunque haya llegado noviembre, aunque llueva y el mar esté
turbio, los cayucos, las pateras siguen llegando a las costas españolas,
quizá porque la miseria no se detiene ante una simple tormenta. Cinco de
las ocho pateras que llegaron ayer a las playas desembarcaron en las Islas
Canarias. En total, 168 inmigrantes, a los que hay que sumar los que se
dispersaron por la costa lanzaroteña y que no fueron localizados,
informaron ayer los servicios de emergencia.
Pasada la medianoche
fueron detenidos en Lanzarote dos inmigrantes irregulares que
desembarcaron de una patera que llegó a la zona de Orzola (Haría),
mientras cinco menores fueron localizados tras desembarcar en Los Ancones,
en Teguise. Los agentes policiales consideran que el resto de los
ocupantes de estas dos embarcaciones, un número aún sin determinar, se
dispersaron al tocar tierra. Por otra parte, a primera hora de la mañana
llegaron 70 inmigrantes al puerto tinerfeño de Los Cristianos, tras ser
rescatados cuando navegaban en un cayuco. Estos son todos varones
subsaharianos, en aparente buen estado de salud, y entre ellos puede haber
dos o tres menores, extremo que será confirmado a través de una prueba
ósea.
Rescatados en alta mar
El cayuco
había sido avistado ayer por la tarde a 110 millas al sur de Tenerife y el
buque «Punta Tarifa» de Salvamento Marítimo lo interceptó a 57 millas de
la isla. Horas después los 38 ocupantes de otra barca fueron rescatados en
alta mar por Salvamento Marítimo, que la alcanzó cuando se dirigía a la
costa de Fuerteventura. Los inmigrantes, también de origen subsahariano,
se encuentran en buen estado de salud y fueron localizados en torno a la
una y media de la tarde a unas doce millas del faro de La Entallada. Una
embarcación de Salvamento los recogió en alta mar y los llevó hasta Gran
Tarajal, a donde llegaron en torno a las cuatro de la tarde.
La
quinta embarcación del día fue vista por un pesquero a las cuatro y media
de la tarde a tres millas de la playa de Maspalomas, en el sur de Gran
Canaria. Salvamento Marítimo acudió a su encuentro y recogió a sus 53
ocupantes, todos varones subsaharianos, quienes fueron llevados hasta el
Muelle de Arguineguín, adonde llegaron cerca de las seis de la tarde.
El círculo se completó en Almería, donde un dispositivo conjunto con
embarcaciones de Salvamento Marítimo y del Servicio Marítimo de la Guardia
Civil realizó una operación de rescate en aguas del Cabo de Gata y
salvaron al menos a una veintena de inmigrantes indocumentados, la mayoría
argelinos sin documentación, y que viajaban al menos en tres pateras.