Chris Simcox, el millonario líder de los Minutemen vigilantes de la frontera en Arizona, que compró de su propio bolsillo un avión robot para vigilar la frontera, ahora construye en Arizona un primer tramo del muro hi tech aprobado por el presidente Bush el mes pasado. Los Minutemen gastarán un millón de dólares en su muro de 1,5 kilómetros con el fin de “enseñar al Gobierno cómo se hace y desafiarle para que cumpla y haga su trabajo”, manifestó Simcox en una entrevista a La Vanguardia días antes de las elecciones en Colorado. La decisión de construir un muro de 1.000 kilómetros “es una victoria para nosotros”, sostiene.

Simcox cree que la inmigración ha sido el tema clave electoral de estas legislativas y que lo será de nuevo en las presidenciales del 2008. “Este presidente ya es cadáver. El mensaje para el próximo candidato presidencial republicano es que, si no toma en serio este tema de la inmigración, perderá como pierde Rick Santorum en Pensilvania. A gente como Santorum la hemos arrojado a los lobos (…) El candidato en el 2008 tendrá que prometer que, en cuanto se instale en la Casa blanca, va a poner al ejército en esa frontera y la va a cerrar”, añadió.