Los verdaderos fascistas

Hace tiempo que el pueblo canario clama por que se controle la inmigración; sin las lecturas demagógicas interesadas o torticeras de los progres; sino que no se permita la inmigración ilegal; porque ningún canario serio y que quiera a esta tierra está de acuerdo en que entre por aire y por mar todo el que le de la gana, sin ser invitado y sin pedir permiso, o pidiendo permiso por un tiempo determinado y quedándose hasta que se le antoje, violando nuestras leyes y con todas las consecuencias negativas que conlleva. La reciente manifestación por el control de la población en Canarias está dejando al descubierto la verdadera calaña de algunos personajes del PSOE canario. Y cuando digo al descubierto es porque esta vez los hechos han trascendido por la gran difusión que han tenido en los medios, porque yo hace tiempo que lo tengo claro.

Hace unos años, a Juan Carlos Alemán lo que le preocupaba de la inmigración eran “los graves problemas que se le podrían presentar a Canarias si regresaban los emigrantes canarios de Venezuela que querrían volver”.

Evidentemente, los canarios pueden volver a su tierra cuando les dé la gana. Ahora resulta que este señor no es que defienda a los inmigrantes, poniéndolos por encima de los emigrantes canarios, sino que defiende lo que le indican desde La Moncloa y Ferraz, por las posibles repercusiones electorales en su contra que pueda tener, por ser el Gobierno central el responsable en inmigración.

Por ello trató que Adán Martín prohibiera la manifestación un derecho constitucional y, no contento con eso, recomendó a Zerolo que despidiera de su trabajo a los convocantes. El futuro de este señor como candidato a alcalde de La Laguna lo deben de tener muy claro los laguneros que no pertenecen a la organización de este grupo de sectarios que, evidentemente, son la inmensa mayoría. Otros personajes de la secta son: Javier Abreu, conocido manipulador; Santiago Pérez, quien amenazó con llevar a los tribunales a los convocantes de la manifestación; Antonio Martinón, quien acusó a los convocantes, y por extensión a los asistentes, de racistas y xenófobos; Francisco Tovar, concejal del PSOE en Santa Cruz, quien leyó varios puntos de la convocatoria y los comparó con los postulados de los nazis, etcétera.

Estos señores, que utilizan la democracia para sus intereses y que tienen la desfachatez de no admitir que los ciudadanos ejerzamos nuestro derecho constitucional a manifestarnos, son los mismos que se han declarado infinidad de veces los paladines de la democracia y han acusado a otros de fascistas. Pero el pueblo ya conoce a los verdaderos fascistas.

José Manuel C. Z.