REGIÓN MURCIA

La Guardia Civil desmantela una red de rumanos dedicada a la trata de blancas

Detenidos los cabecillas de la banda y las 'carceleras' de las víctimas La pista la dio una de las jóvenes retenidas que consiguió escapar saltando por una ventana

La Verdad, 26-10-2006

LA VERDAD/MURCIA

Malvivían en condiciones infrahumanas y recibían castigos físicos y psicológicos si no cumplían con las exigencias de sus explotadores. La Guardia Civil de Murcia ha desmantelado en la Región una peligrosa red de rumanos acusados de retener, obligar y comerciar con mujeres para ejercer la prostitución. La operación Cautiva, que sigue abierta, se ha saldado de momento con nueve detenidos, según informó anoche la Guardia Civil. Trece mujeres que eran obligadas a prostituirse han sido libertadas por los agentes.

La investigación se inició el pasado mes de septiembre. Según las fuentes consultadas por La Verdad, el dispositivo de vigilancia se activó después de que una de las chicas retenidas consiguiera escapar, lanzándose por una ventana, y avisar a los agentes sobre su situación. En su desesperada huida, la joven se fracturó una pierna.

El Equipo de Mujer y Menor de la Policía Judicial de Murcia averiguó que la banda, con base en la Región y compuesta por cinco personas, tenía una «estructura jerarquizada» y mantenía una estrecha relación con numerosos clubes para distribuir a las mujeres retenidas. Según la Guardia Civil, el jefe del grupo «mantenía contactos con otras personas en Rumania, dedicados a captar mujeres a las que mediante engaño se les ofrecía venir a España a trabajar». Una vez en el país, empezaba su calvario. Las chicas quedaban a disposición del proxeneta, les retiraban todas sus pertenencias y documentación y las obligaban a ejercer la prostitución «mediante coacciones y amenazas contra ellas y sus familiares en Rumania».

La red tenía sus tentáculos. Las investigaciones han permitido descubrir que el jefe de la banda disponía de varias chicas de confianza. Su misión consistía en ejercer «un férreo control y vigilancia de las mujeres retenidas».

‘Chicas de confianza’

Ellas se encargaban de trasladar a las jóvenes obligadas a prostituirse desde las viviendas donde residían hasta los clubes de alterne. Además, recababan el dinero que percibían comerciando con su cuerpo. Pero también les impartían castigos «por su falta de disposición o poca productividad para las arcas del proxeneta», según la Policía Judicial.

Entre los detenidos figuran cinco integrantes de la red delictiva, identificados como R. P. G., de 38 años y cabecilla de la red; A. A. I., de 20 años; M. U., de 22; V. N. C., también de 20, y y R. P., de 21, todos de nacionalidad rumana, que están acusados como presuntos autores de los delitos de asociación ilícita, relativo a la prostitución, coacciones y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros. También han sido arrestadas cuatro personas colaboradoras de la banda: A. A. H., de 34 años, y F. J. C. P., de 36, españoles; C. M. S., de 25 años y nacionalidad brasileña, y B. S. B. V., de 35 años y origen colombiano.

En la operación Cautiva, la Guardia Civil realizó cuatro registros: dos en viviendas de la ciudad de Murcia y otros dos en clubes de alterne, en los que se ha incautado numerosa documentación relativa a la red delictiva que ahora se está analizando detenidamente.

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