SOFIA. - El presidente de Bulgaria, Georgi Parvanov, resultó ganador con un amplio margen en la primera vuelta de las elecciones celebradas ayer, pero deberá definir la elección en una segunda vuelta la próxima semana, según una encuesta.

Un sondeo realizado por Gallup para la televisión estatal BTV mostró que Parvanov ganó con un 64,6% en la primera vuelta. El segundo lugar, con el 20,3%, fue para Volen Siderov, un nacionalista cuyo xenófobo partido Ataque se opone a la entrada en la Unión Europea el próximo año, informa Reuters. Ataque ha atraído al voto radical de protesta contra la pobreza y la corrupción del país, según los analistas.

«Quiero dar las gracias a todos los que me han apoyado y felicitarles por un resultado muy convincente», dijo ayer Parvanov. «Cuando tienes estas cifras, no tienes nada por lo que preocuparte», añadió.

La baja participación electoral (era del 35% una hora antes del cierre de los colegios electorales) es la causa de que tenga que celebrarse una segunda vuelta el 29 de octubre.

El ex presidente del Tribunal Constitucional, Nedelcho Beronov, candidato por cinco partidos de derecha, quedó fuera de la carrera por la segunda vuelta al conseguir entre el 11 y el 12% de los votos, según el Centro Nacional de Demoscopia.

Así, en la segunda vuelta el electorado conservador tendrá la complicada tarea de elegir entre el candidato de los socialistas y el ultranacionalista.

Parvanov, antiguo líder del ex comunista Partido Socialista, se ha ganado la admiración de mucha gente en este país de 7,8 millones de habitantes por lograr su adhesión a la OTAN en 2004 y a la Unión Europea el próximo 1 de enero.

Los expertos aseguran que Parvanov ha usado sus limitados poderes (que incluyen la posibilidad de vetar leyes) para aumentar su influencia. Sus detractores le achacan que no ha sido capaz de reducir la corrupción, el crimen organizado ni de elevar el nivel de vida, que es el más bajo de la UE, con salarios medios de 160 euros al mes.