La otra orilla. Carta desde Senegal

Canarias 7, 21-10-2006


Las Palmas de Gran Canaria

Estimado señor, le escribo desde Dakar. Soy uno de los miles de jóvenes que ha sido devuelto a nuestro país, después de haberse jugado la vida, haber burlado la muerte en una barca y haber llegado a las costas de Canarias. En primer lugar, mi agradecimiento por el trato que recibimos en su isla, a pesar de estar apiñados en los locales de la Policía. Yo vi morir a un compañero en esos garages y a todos nos entró mucho miedo.

También dormí al aire libre, comí poco, pasé frío, me llevaron de un lado para otro, pero el trato fue siempre muy bueno. Nunca nos dijeron a dónde nos llevaban al subir al avión. Sólo los primeros que llegaron a San Louis tuvieron el privilegio de ser recibidos por el presidente Wade, que les prometió un trabajo que, aún hoy, meses después, no tienen. La situación aquí cada día está peor. A aquel primer grupo de repatriados han seguido muchos más, hasta más de 3.000. Por eso le escribo.

Me dicen que ya no llegan barcas, a pesar de que de aquí siguen saliendo. Me dicen que sus calles han comenzado a llenarse de gente que nos llaman cucarachas, que dice que les transmitimos enfermedades y que les vamos a invadir. Me gustaría que una sola de esas personas, incluidos los políticos que los alientan, viniera esta noche a Dakar. Hoy ha vuelto a fallar la luz eléctrica. Mi familia reunió el dinero de varias generaciones para mi viaje en cayuco. Ahora soy un fracasado sin trabajo, al que nadie ha devuelto la fortuna perdida. Así que, dígame, ¿qué puedo hacer? He arriesgado mi vida en recorrer miles de kilómetros en la mar; imagine de lo que soy capaz de hacer. Somos miles los jóvenes que estamos muy inquietos y que piensan como yo. Más del 62 por ciento de África tiene mi edad y usted me pide que cruce los brazos, mientras su televisión me dice que hay un mundo mejor. La situación social es muy tensa. Habrá cada vez más violencia en las calles y, seguramente, muchas muertes. Cada joven que llega en avión devuelto desde España son 40 a 60 personas de su familia o clan muy enfadadas. No se crea lo que le dicen. Esto va a estallar pronto. Atentamente, Osmane.

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