pamplona. La consejera de Salud del Gobierno de Navarra, María Kutz, afirmó ayer en comisión parlamentaria que no existe ninguna relación entre los casos de tuberculosis detectados en Cortes y la población inmigrante que reside en la localidad o las inundaciones registradas en la zona en los últimos años.

Kutz, quien compareció en la comisión a solicitud de Aralar, indicó que el Instituto Navarro de Salud Pública, tras ser alertado por el sistema de vigilancia epidemiológica del aumento de las tasas de incidencia de la tuberculosis en Cortes, decidió realizar en la localidad una “intervención poblacional”.

El objetivo de esta intervención fue el de aplicar un tratamiento profiláctico que evitase la aparición de la enfermedad tuberculosa y por tanto la extensión de la misma.

En ese sentido, explicó que en unos casos la tuberculosis se detecta como una “infección latente”, que no es contagiosa, y en otros se desarrolla la enfermedad, que es contagiosa si es de carácter pulmonar y no lo es si es de carácter extrapulmonar. De hecho, destacó la consejera, esta enfermedad vírica, que se contagia por vía aérea por enfermos con lesiones abiertas en la laringe, se desarrolla sólo en un 5% ó 10% de las personas infectadas por el bacilo.

La consejera comentó que, en una primera intervención, se examinó al tramo de población de 20 a 24 años y se hicieron pruebas a 144 jóvenes, de los que 43 (un 30% del total) dieron resultado positivo, aunque en sólo un caso había sospechas de desarrollo de la enfermedad.

A la vista del resultado de esta intervención, se decidió ampliar las pruebas a los jóvenes de 16 a 19 y de 25 años, 157 en total, de los que 24 dieron resultado positivo (un 17%) y ninguno de ellos provocó sospecha clínica de padecer la enfermedad.

Tras acordarse una nueva ampliación, al tramo de edad de 11 a 15 años, se observó que, de 109 personas en total, sólo 8 (un 7%) estaban infectados y ninguno de ellos era sospechoso de haber desarrollado la enfermedad. >efe