NOELIA FERREIRO

MADRID.- Consciente de los riesgos que entraña «una política migratoria con aciertos y dificultades», la secretaria de Estado de Emigración e Inmigración, Consuelo Rumí, apeló ayer a la necesidad de promover más que nunca «los valores de integración» en aras a prevenir conflictos de convivencia. «La sociedad española está a tiempo de anticiparse a problemas de exclusión», advirtió, en referencia a los altercados que sacudieron Francia el pasado año.

Rumí, que presentó en Madrid el libro Veinte años de inmigración en España, de la Fundación Cidob, calificó de «muy positivas» las reuniones que la vicepresidenta primera del Gobierno mantuvo la semana pasada con los representantes de cada Grupo, puesto que, recordó, es en «el marco parlamentario» y en la Subcomisión que se creará a estos efectos donde ha de debatirse la política común de inmigración. Un asunto que, a su juicio, «debe ganar más espacio en la agenda internacional».

La secretaria de Estado aseguró que «el Gobierno no ha alterado los ejes de una política de inmigración integral que se comprometa con la lucha contra la inmigración clandestina y que haga posible la llegada ordenada de extranjeros con arreglo a la legalidad».

Alertó del «daño de los mensajes simplistas que se exhiben desde las tribunas parlamentarias» y que proponen «con frivolidad recetas sencillas para problemas que resultan complejos».

Por todo ello, dijo, hacía falta una obra como Veinte años de inmigración en España, de la que destacó «su mirada rigurosa a un fenómeno que marcará los perfiles de la convivencia colectiva durante décadas».

El libro, que nace como un anuario de las políticas migratorias que será actualizado cada año, fija en 1985 el punto de partida para su estudio «por ser el año en que, no sólo el fenómeno empieza a adquirir significación numérica, sino que, además, se aprueba la primera Ley de Extranjería», explicó el catedrático de Sociología Joaquín Arango, editor de la obra junto a Eliseo Aja, catedrático de Derecho Constitucional.

Crecimiento migratorio

La obra, que se acerca a la inmigración española desde dos vertientes – la jurídica y la sociológica – , recoge cuestiones tales como las diferentes legislaciones aplicadas al fenómeno, la regulación de las entradas y el control de las fronteras, los derechos, los permisos de residencia y las últimas reformas normativas. Y ello dentro de una sociedad que, en dos décadas, pasó de los 200.000 inmigrantes a los tres millones que registra ahora.

Según Eliseo Aja, «desde la ruptura del consenso político en el año 2000 hay demasiados cambios y novedades en un ámbito que requiere estabilidad, independientemente del partido que gobierne».