Un perro muerde a una joven inmigrante azuzado por su dueño

El Mundo, 16-10-2006

La agresión se produjo de madrugada en La Rambla de Barcelona Estaban hablando animadamente en la Rambla de Barcelona.Eso sí, era tarde. Puede que a los cuatro jóvenes nigerianos se les escapara algún grito, alguna risa demasiado alta. Antonio quería dormir y dice que no le dejaban. Por eso, bajó de su casa con el perro, de la raza boxer. Salió a la calle con el can pero sin llevarlo atado y sin bozal. Le gritó para que atacara a los chicos, que salieron corriendo aunque el animal alcanzó a una joven. Le mordió en el brazo y tuvo que ser hospitalizada. Los Mossos d’Esquadra investigan el suceso.


Sobre las 4.30 horas del pasado lunes, Iyore estaba junto a unos amigos en la calle Aroles, junto a la Rambla. Charlaban y se reían, según reconoció la víctima ante los agentes de la policía autonómica. Antonio estaba en su casa oyendo a los jóvenes cuando bajó a la calle. Según la chica, azuzó al perro diciéndole «corre, corre y come». Los chicos corrieron y el perro mordió.


El boxer, raza que no es considerada especialmente peligrosa, atacó a la joven mientras el dueño no hacía nada, según explicaron fuentes policiales a este diario, que confirmaron la versión de la víctima.


No fue hasta que llegó una dotación de los Mossos d’Esquadra que pudieron separar al perro de la chica, que estaba estirada en la calle mientras el dueño del perro miraba. Los agentes avisaron a una ambulancia y la joven fue trasladada al hospital. Los policías interrogaron a Antonio. Este joven, de 21 años, explicó que el can no es suyo. Dijo que es de su primo y que él está viviendo en la calle Aroles con su tía.


Los agentes, miembros de una patrulla de seguridad ciudadana de Ciutat Vella, buscaron a los amigos de la chica agredida, pero no los encontraron. No en vano están en situación irregular y prefirieron no tener trato alguno con la policía para evitarse problemas.


Iyore, que también se encuentra en situación irregular en España, fue trasladada al Hospital del Mar de Barcelona, donde la trataron de diversas heridas inciso – contusas. Por recomendación de los policías, la joven acudió horas después a comisaría a denunciar lo sucedido. Relató que estaba con sus compatriotas en la calle charlando tranquilamente cuando vieron al perro y a su dueño diciéndole «corre, corre, come». Después, notó los colmillos del animal en su brazo y vio al sospechoso que no hacía nada para evitar que el animal le mordiera.


Antonio, que tiene antecedentes policiales por robos con fuerza y con violencia, aseguró que estaba en casa tranquilamente cuando el perro se le escapó de casa. Declaró que intentó evitar que agrediera a la chica y justificó el hecho de que el animal no llevara ni bozal ni correa porque no estaba previsto que saliera a la calle. No explicó, no obstante, cómo se le pudo escapar de casa. El joven reconoció que había oído los gritos de los jóvenes y admitió que le molestaban. Incluso explicó que salió al balcón para increparles. Tampoco pudo negar que les lanzó piezas de fruta. Sin embargo, negó en todo momento que hubiera instigado al animal para que mordiera a los inmigrantes.


Los Mossos d’Esquadra investigan los hechos y dieron traslado de lo sucedido al juzgado de guardia. Será difícil que algún testigo, además de la víctima, relate lo sucedido. Si los amigos de la chica salieron corriendo al ver al perro y después al ver a los Mossos, ni que decir tiene que no acudirán al juzgado a declarar.


Numerosos precedentes en Cataluña


BARCELONA. – La Audiencia de Barcelona condenó en julio de 2003 a un joven a cuatro años de cárcel por azuzar a su perro contra un vecino que le había reprochado una gamberrada. Un año después, fue detenido en L’Hospitalet de Llobregat el dueño de un pitbull después de que el animal mordiera en la pierna y en la mano a un agente de los Mossos d’Esquadra. El policía tuvo que disparar al can para que le soltara.


Meses después, también fue detenido el dueño de un perro, de la raza American Sanfford, que atacó a un matrimonio de Manresa.En junio de 2005, un Akita inu mató a una niña de dos años en Sitges. Dos perros agredieron a un niño de siete años el pasado mes de abril en Vilafranca. Sólo un mes después, fue un Shar Pei el que hirió a una niña de 11 años en Esparraguera.

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