EL último tema puesto sobre la mesa trató sobre las declaraciones realizadas por el Papa Benedicto XVI en la universidad alemana de Radisbona y sobre la oleada de reacciones que las mismas suscitaron en el mundo islámico. En torno a la polémica, en la misma mesa y en un ambiente presidido por el respeto exponían puntos de vista representantes de un buen número de corrientes religiosas, entre ellas la musulmana, la judía y la católica. El lugar no era otro que la sede que la Plataforma Unesco por la Paz tiene en Málaga. No hubo conflictos más allá de la diversidad de opiniones.

En estos momentos, su junta directiva, formada por los representantes de las 22 corrientes religiosas, espirituales y filosóficas que ya la integran, estudian la última solicitud de ingreso, proveniente de la comunidad luterana, que se reune en un local de Herrera Oria. Con una fuerte implantación en Alemania, en el caso de la capital, junto a los germanos destaca la presencia de miembros procedentes de Argentina, así como los propios españoles.

«Yo creo que esta comunidad lleva en Málaga aproximadamente un año y estimo que cuenta con unos 400 miembros, aunque destaca la presencia de los jóvenes». Lorenzo Rodríguez es el presidente del Centro Unesco por la Paz y la Tolerancia, estatus que obtuvo en diciembre después de que el proyecto se desarrollara durante tres años bajo el nombre de Plataforma por el Diálogo Intercultural e Interreligioso, que ya nació con la vocación de promover el entendimiento entre las distintas corrientes presentes en la provincia.

La plataforma es así un crisol que da cabida a las más diversas creencias, celebraciones, ritos, filosofías y métodos, y deja constancia de que en Málaga hay credos para todos los gustos: desde la mayoritaria religión cristiana, pasando por las importantes comunidades islámica, budista y judía, hasta corrientes minoritarias como Fe Baha’í e incluso algunas que han sido tachadas de sectas, como el caso de Nueva Acrópolis, Hare Krishna o Brama Kumaris.

Sobre las sectas

«Yo soy catálogo, historiador y teólogo y como presidente de la plataforma he conocido desde dentro su funcionamiento y no he visto nada que haga decir que se trata de sectas. En ninguna de ellas he visto nada que suponga a sus miembros la pérdida de conciencia individual en favor del grupo o la absorción del pensamiento. No he visto asomo de intolerancia o una intención de absorber voluntades, sino todo lo contrario: transparencia y libertad», asegura Rodríguez.

Según el presidente de esta plataforma avalada por la Unesco, después de la católica, lógicamente la más fuerte y numerosa, es la islámica la religión que aglutina a un mayor número de fieles. Se estima que más de 20.000 seguidores musulmanes se agrupan en torno a cuatro grandes comunidades asentadas en la provincia, siendo la de Fuengirola, con su centro neurálgico en la mezquita de la localidad, la más fuerte. Tras la de Fuengirola, sería la comunidad musulmana de Marbella, con la mezquita del palacio del Rey Fahd como lugar de oración, la segunda en número de fieles, seguida de la capital, que cuenta con un templo en la calle Bendeja y Nerja, en la costa oriental.

Importante es también por la capacidad de convocar a seguidores procedentes de todo el mundo el centro budista Karma Guen, en Vélez¯Málaga, con eventos multitudinarios como la celebración del Powha ¯aprender a morir conscientemente, según explican¯ que llega a reunir centenares de personas en El Trapiche. A este mismo linaje, ¯ Karma Kagyu¯ pertenece la estupa de Benalmádena, considerada la más grande de Occidente y visitada por 200.000 personas de todo el mundo desde que fue inaugurada en octubre de 2005. También en Alhaurín de la Torre existe un templo regentado por cinco monjes, aunque se trata de una rama budista diferente a la anterior.

Dos ramas de la religión judía están también integradas en la plataforma. «Una de ella es la hebrea abrahanista, que tiene su centro de oración en la sinagoga de Duquesa de Parcent y que está dirigida por el rabino monseñor Joseph Cohen», explica Lorenzo Rodríguez. La segunda corriente judía con presencia en Málaga es la sefardita, que se agrupa bajo el nombre de ‘Raíces’, con sede en Torremolinos. «Cuentan con un centro cultural, de meditación, traducción de escrituras y en el que dan conferencias. Conservan tradiciones ancestrales y realizan conciertos en directos de música sefardí tal y como se tocaba en los siglos XIII y XIV», asegura el presidente de la Plataforma por la Paz. Rodríguez afirma que en Málaga la comunidad judía es fuerte, con una estimación de 8.000 a 10.000 seguidores. «De hecho, la Festividad del Cordero, una celebración importante para ellos, puede reunir a unas 2.000 personas».

Mormones

También centro de meditación, oración y formación es el templo que los mormones tienen en la zona de La Rosaleda. «Allí suelen vivir misioneros americanos provenientes de la ciudad de Utha, el centro mormón por excelencia. Son esos jóvenes uniformados que vemos de dos en dos por la calle», apunta Rodríguez.

La fe incondicional a los preceptos marcados por Joseph Smith, considerado su apóstol, gran profeta y a la postre fundador en 1823 de la que se dio en llamar la Iglesia de los Santos del Último Día lleva a todos los varones seguidores de esta doctrina a dedicar dos años de su vida a trabajar como misioneros en diferentes partes del mundo. «Con el dinero que ahorran con sus primeros trabajos, se mantienen durante este tiempo de misión», explica.

En la plaza de Babel hay otra iglesia mormona. El culto les lleva a reunirse en sus templos todos los domingos, de diez de la mañana a dos de la tarde. El presidente de la plataforma estima que no hay más de 2.000 mormones en la provincia. «Aunque mantienen tradiciones del cristianismo hay diferencias tales como que no consideran que María sea la madre de Dios o el hecho de no celebrar la ceremonia de la consagración».

Los mormones tampoco escapan a la consideración de secta y como tal aparecen en algunos libros en los que se aborda este tema.

Aunque han sido invitados, uno de los grupos que no se han integrado en la plataforma ha sido el de los Testigos de Jehová. «Ignoro las razones, pero les cuesta entrar», afirma el presidente, que considera que el número de seguidores de esta corriente es importante en Málaga, y de hecho asegura saber de la existencia de al menos 14 templos en la provincia.

En cuanto a la iglesia evangélica, Rodríguez explica que existen cuatro grupos diferenciados, y que los pastores han formado una plataforma propia. «Sólo en Málaga capital yo he llegado a contabilizar doce templos evangelistas», dice.