E.C.

LAS PALMAS. No cesa el goteo de inmigrantes que llegan a Canarias. Mientras se va cerrando la vía de los cayucos que parten desde el África subsahariana, se reabre la ruta de las pateras que tienen en las costas de Marruecos su punto de partida. Sólo ayer arribaban a las Islas seis de estas pequeñas embarcaciones que dejaron en Lanzarote y Gran Canaria 96 inmigrantes de origen magrebí, entre los que viajaban al menos cuarenta menores, según informaron fuentes de la Guardia Civil. Todos se encontraban en buen estado de salud, aunque uno de ellos tuvo que ser rescatado por un pesquero cerca de la zona conejera de La Mareta después de que éste se arrojase al agua. En una de las cuatro pateras que llegaron a la isla de los volcanes se produjo también la detención de un «contacto» de los indocumentados que llegan a Lanzarote. El individuo, marroquí, esperaba con un vehículo a los inmigrantes para ayudarles a huir una vez en tierra.

Agentes de la Guardia Civil en las islas denunciaron ayer de nuevo que el Sistema Integral de Vigilancia Exterior (SIVE) , que en Lanzarote y Gran Canaria cuenta «sólo» con dispositivos móviles, «sigue sin detectar la mayor parte de las embarcaciones». También de Gran Canaria salía al mediodía de ayer la patrullera «Almirante Díaz Pimienta», después de que un avión localizase a cuarenta millas del sur de la isla un cayuco, aunque fuentes de la Guardia Civil informaron más tarde de que había sido «una falsa alarma».