Las palmas – Las autoridades mantienen muchas dudas sobre la muerte el
pasado miércoles de una veintena de inmigrantes frente a las costas
canarias relatada por sus compañeros de travesía, pero al fin se han
decidido a intentar esclarecer el asunto. El delegado del Gobierno en
Canarias, José Segura, anunció ayer que las autoridades judiciales han
abierto una investigación para aclarar el naufragio de una zodiac al sur
de Gran Canaria, en el que fueron rescatadas once personas.
   Segura
insistió en la necesidad de destacar «que esas once personas han tenido la
inmensa suerte de salvar sus vidas», pero a renglón seguido subrayó que no
podía afirmar que hubiera veinte fallecidos, como declararon los
supervivientes a la Policía. «No estamos en condiciones de poder hacer
ningún otro tipo de afirmación – añadió – si hemos de ser rigurosos, porque
cuando se salvó a esas personas, el barco hizo varios recorridos y no se
detectaron cadáveres».
   Segura hizo hincapié en que ninguno
de los oficiales ni de los tripulantes del Saf Marine Nimba, el barco
mercante de bandera sudafricana que acudió al rescate tras detectar los
restos de la embarcación, «avistó ningún cadáver en las proximidades» del
lugar donde se rescató a los once náufragos. Hay que recordar que, tras
llegar a puerto, los supervivientes del naufragio aseguraron a los agentes
que los recibieron que una veintena más de inmigrantes que completaba la
expedición había fallecido en el mar, informa Efe. De hecho, unas imágenes
tomadas en la zona parecen confirmar que hay algún cuerpo bajo el agua en
el momento del rescate.
   Más personas a bordo
   Sin embargo, José Segura insistió en no poder aclarar ese aspecto de la
tragedia, por no disponer de datos oficiales al respecto, si bien admitió
que «parece ser que iban otras personas a bordo, según dicen algunos de
los náufragos». «Pero no estoy en condiciones de decir, en absoluto,
cuántos más podían haber sido los ocupantes iniciales de la lancha»,
apostilló.
   Eso sí, anunció que «se está investigando, para
saber desde dónde habían salido, de dónde habían zarpado y cuántas
personas había a bordo». Como primera providencia para obtener alguno de
esos datos, Segura señaló que «se está contactando con autoridades
policiales de los países más próximos, ya que son ciudadanos de origen
magrebí».