Once inmigrantes rescatados aseguran que otros veinte murieron en el naufragio
Marineros que les socorrieron al Sur de Canarias no vieron rastro de los cadáveres
Deia, 06-10-2006ONCE INMIGRANTES que fueron rescatados en la madrugada de ayer en alta mar por un buque mercante, a 120 millas al sur de Gran Canaria, después de que su lancha neumática se partiera en dos, declararon ante la Policía que otros veinte compañeros murieron en el naufragio, informaron fuentes policiales.
Pese a ello, no se había establecido ningún dispositivo de búsqueda de los inmigrantes ahogados, ya que, según explicó un portavoz de Salvamento Marítimo, «no consta ninguna información oficial de que en la embarcación viajasen otras personas además de los once rescatados», algo que tampoco aclaró la Delegación del Gobierno en Canarias, en espera de más datos.
Según las fuentes policiales, los inmigrantes rescatados declararon que la lancha neumática en la que iban se había partido en dos y que unos se hallaban en la proa y otros en la popa de la embarcación cuando fueron auxiliados por el buque, a 120 millas al sur de Gran Canaria.
El barco que les rescató, un portacontenedores de nombre “Saf Marine Nimba” y bandera sudafricana, desembarcó a los inmigrantes sobre las dos de la madrugada de ayer en el puerto de Las Palmas de Gran Canaria y prosiguió su ruta horas después, explicaron fuentes de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, que dijeron también desconocer la existencia de los fallecidos.
Unos supuestos cadáveres de los que tampoco vieron rastro alguno los tripulantes del buque que auxiliaron a los ocupantes de la lancha durante la maniobra de rescate, que duró hora y media, según destacaron fuentes de Salvamento Marítimo.
De hecho, no observaron más que una embarcación semihundida y once inmigrantes, pero ningún cadáver ni indicio de la existencia de más personas, añadieron.
Mientras el “Saf Marine Nimba”, que recogió a los inmigrantes las cinco de la tarde y les desembarcó en el puerto de Las Palmas de Gran Canaria al filo de las dos de la madrugada, prosiguió su ruta tras repostar combustible, la Policía nacional trataba ahora de confirmar la desaparición de esas veinte personas que los supervivientes aseguraron que iban en la lancha siniestrada.
Cabe significar que en el pasado mes de agosto, al menos dieciséis inmigrantes murieron «de hambre y sed» cuando trataban de alcanzar las costas canarias en un cayuco, según informaron las autoridades de Mauritania. Días después, otros tres hombres perdían la vida en el trayecto desde África occidental hasta las islas de las costas del Estado español.
(Puede haber caducado)