Once supervivientes de un naufragio dicen que otros 20 se han ahogado
A las autoridades canarias no les consta fallecido alguno, por lo que no se ha dispuesto un dispositivo de búsqueda Comienza el reparto de menores por la Península
Diario Sur, 06-10-2006JOSÉ MORENO/COLPISA. TENERIFE
Once inmigrantes fueron rescatados en alta mar en la madrugada de ayer por un barco mercante a cien millas de la isla de Gran Canaria. Los extranjeros aseguraron que otras veinte personas que viajaban con ellos se ahogaron al caer al mar tras partirse en dos la patera en la que intentaban alcanzar las costas canarias. Pero los barcos que faenan en la zona no han visto de momento resto alguno del naufragio. El barco ‘Saf Marine Nimba’ avistó a los inmigrantes a unas 120 millas al sur de Gran Canaria.
Siete adultos y cuatro menores de origen magrebí viajaban a la deriva en una lancha neumática semihundida. Su estado de salud es bueno, aunque algunos sufren quemaduras rozaduras leves debido a lo penoso de la travesía. La tripulación del mercante manifestó que en la zona en la que rescataron a los náufragos no vieron más que su barca semihundida con once inmigrantes, pero ningún cadáver ni señal de que en ella hubieran viajado más personas. El buque trasladó a los inmigrantes hasta el puerto de Las Palmas de Gran Canaria, donde desembarcaron sobre las dos de la madrugada.
Hundidos
Las autoridades no han hallado, de momento, ningún indicio que confirme la muerte de los 20 compañeros denunciada por los inmigrantes. En el lugar del rescate no fue visto ningún cadáver, por lo que Salvamento Marítimo no ha montado ningún dispositivo de búsqueda de esos supuestos desaparecidos. Según la versión del naufragio ofrecida por el delegado del Gobierno en Canarias, José Segura, el barco portacontenedores ‘Saf Marine Nimba’, de bandera belga, navegaba el miércoles por la tarde a un centenar de millas al sur de Gran Canaria cuando «percibió a lo lejos una embarcación flotando y a una personas haciendo señales, pidiendo auxilio con la mano».
Al acercarse la tripulación comprobó que «eran unos náufragos», por lo que comunicaron el avistamiento a la Capitanía Marítima de Las Palmas, que «les dio instrucciones para que acudiesen a su auxilio». Así subieron a bordo a los once supervivientes. El barco, que había partido de Algeciras y se dirigía a Togo, recibió también instrucciones desde Capitanía Marítima para que buscara «si había algún superviviente», pero «no vio nada», según el delegado del Gobierno.
Por otra parte, el Gobierno inició ayer el traslado de menores inmigrantes desde Canarias a la Península para descongestionar los abarrotados centros de acogida del archipiélago. De momento, tan sólo se ha movilizado a catorce jóvenes – acompañados en tres vuelos regulares por sus correspondientes monitores – , pero hoy está prevista la reubicación de otros seis y, según el Gobierno canario, antes de final de año seiscientos chicos habrán sido repartidos por toda España.
El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, afirmó el miércoles en el pleno del Congreso que tan sólo las comunidades autónomas gobernadas por los socialistas, además del País Vasco y Murcia, se habían ofrecido para acoger a estos menores. Sin embargo, la Generalitat valenciana aseguró ayer que se hará cargo de quince adolescentes procedentes de centros canarios antes de fin de año. Y la consejera de Empleo y Asuntos sociales de las Islas señaló que «todas las comunidades están ofertando plazas».
Locales provisionales
A día de hoy, hay en Canarias alrededor de 880 menores inmigrantes sin tutor: la mayor parte de ellos son senegaleses y se encuentran en centros gestionados por los cabildos. En Tenerife, la isla más desbordada, el gobierno autonómico se ha hecho cargo de unos 375 jóvenes, repartidos en los centros de Tegueste, Esperanza y Garachico. Se trata de locales provisionales que el gobierno quiere cerrar antes del invierno; por eso, serán los primeros en abandonar las islas.
El Ejecutivo central se hará cargo de la organización y el coste de los traslados y también de su protección a través de centros gestionados por organizaciones no gubernamentales. De hecho, de los 600 chicos que según el gobierno canario llegarán a la Península antes de que acabe el año, sólo 120 irán a parar a centros dependientes de las administraciones autonómicas.
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