La UE ratifica la obligatoriedad de informar previamente sobre cualquier regularización

ABC, 06-10-2006

ENRIQUE SERBETO CORRESPONSAL

LUXEMBURGO. Los ministros de Interior de la UE ratificaron ayer la puesta en marcha del mecanismo que hace obligatorio comunicar a las instituciones comunitarias y a los demás países miembros las decisiones importantes que cada cual tome en materia de inmigración, para evitar que vuelvan a producirse situaciones como la que provocó la regularización aprobada por el Gobierno español. El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, consideró que se trata de una medida «interesante» pero que su vinculación con la actuación de su Gabinete «es discutida y discutible» y que en todo caso «la cuestión está zanjada, es un debate viejo» y que «los reproches son cosa del pasado, al menos para mí».

En cambio, Rubalcaba se deshizo en elogios ante el documento de conclusiones del consejo en el que según sus palabras «se bendice la actuación del Gobierno» y se recogen «punto por punto» sus políticas. Pero en realidad, los ministros se limitaron a pedir que «se intensifiquen los trabajos sobre un sistema de gestión integrada de las fronteras exteriores» como un objetivo «a largo plazo». Nada nuevo en materia de mayores competencias medios o presupuestos para Frontex (la Agencia Europea de Fronteras) ni de medidas concretas. Todo lo más el consenso implícito de que se prorrogará hasta diciembre su misión en Canarias, pero ningún anuncio preciso de algún país además de Italia o Portugal vaya a enviar refuerzos. En cuanto a cualquier financiación, se deja claro que deberá buscarse «dentro del marco financiero existente». El coste de la prolongación de la misión de Frontex será, según el comisario Franco Frattini, de «dos o tres millones de euros» y saldrán del propio presupuesto de esta agencia, que precisamente ayer fue incrementado en el Parlamento Europeo de 21 a 30 millones.

La presidencia finlandesa ha enviado una carta al Gobierno español en la que encarga a Rodríguez Zapatero que defienda el tema de la inmigración en la cumbre de Latí el próximo día 20 de octubre, pero de hecho los países del norte, sobre todo Alemania, que han sufrido en solitario las grandes avalanchas de emigrantes del este desde la desintegración del bloque socialista y la Unión Soviética siguen siendo muy críticos hacia las quejas de España y los demás países del sur de la Unión en esta materia. Por ello, en las reuniones del Consejo no se destila ningún entusiasmo por este tema. Por el contrario, los ministros estaban ayer especialmente preocupados por el retraso en la apertura de las fronteras interiores correspondiente a los diez nuevos estados miembros.

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