MÁS DE la mitad de los 60 inmigrantes marroquíes, que viajaban en una patera interceptada en la madrugada de ayer cerca de la costa de La Rábita (Granada), son menores, aunque se les harán pruebas oseométricas para concretar las edades.

Según una primera apreciación visual, puede tratarse de 33 menores, muchos de ellos integrantes de la misma familia, por lo que fueron de inmediato puestos a disposición de los servicios sociales de la Junta en Granada, informaron fuentes policiales.

De confirmarse esta cifra, este contingente de jóvenes marroquíes sería el más numeroso interceptado en una patera en la costa granadina y generaría importantes problemas de saturación en los ya abarrotados centros de acogida de Granada y causaría cierto desequilibrio en las cuentas que el Gobierno español ha hecho con las CC.AA. para el “reparto” de los menores de los centros canarios.

El resto, los otros 27 inmigrantes adultos permanecieron en el puerto de Motril hasta que se efectuaron los trámites para su repatriación, que el Cuerpo Nacional de Policía hizo a lo largo del día.

La patera en la que viajaban y en la que también iba una mujer fue localizada sobre la una de la madrugada por las cámaras del Servicio Integral de Vigilancia Exterior (SIVE) a unas trece millas de la costa, e interceptada una hora más tarde por la embarcación «Río de Aragón» de la Guardia Civil.