S. SANZ/COLPISA. MELILLA / ARGEL
Cinco inmigrantes subsaharianos resultaron heridos ayer al intentar saltar la valla que separa Melilla de Marruecos. Los indocumentados, que eran parte de un grupo de 40 clandestinos, quedaron atrapados en la concertina de cuchillas que aún queda en la alambrada más próxima al suelo español. El mismo grupo intentó poco después un nuevo asalto a cien metros del anterior, que fue frustrado por las Fuerzas Auxiliares Marroquíes, que detuvieron a 20 de ellos.

El delegado del Gobierno en la ciudad, José Fernández Chacón, explicó que en el primer intento los inmigrantes «posiblemente utilizaron escaleras y cuerdas» y que cogieron por «sorpresa» al ejército marroquí. Después, los irregulares «dieron un salto» para acceder a la segunda, salvando los 2,5 metros de espacio entre ambos obstáculos. Allí quedaron enganchados entre las cuchillas y fueron rescatados por la Guardia Civil.

Tercera valla sin cuchillas

Tres de los subsaharianos fueron trasladados al centro de salud de Polavieja, donde les dieron de alta por el servicio de urgencias tras curarles heridas de carácter leve. Los otros dos que también quedaron atrapados fueron trasladados al Hospital Comarcal, donde les diagnosticaron esguinces de tobillo. A mediodía, los cinco fueron trasladados a la Jefatura Superior de Policía para abrir el correspondiente expediente de expulsión.

Ambos intentos de asalto tuvieron lugar en zonas donde todavía no ha terminado de construirse la tercera valla, destinada a impedir la entrada de inmigrantes mediante un sistema de cables trenzados de acero. El delegado subrayó que hasta que no termine de construirse este sistema que en teoría no daña a los inmigrantes (posiblemente este mes) no se eliminará ese alambre de espinos.

El de ayer es el segundo intento de asalto a la valla de Melilla en 2006. El anterior fue mortal. Ocurrió el pasado 3 de julio, cuando resultaron muertos cuatro subsaharianos, por disparos marroquíes según España.

El delegado del Gobierno subrayó que mientras el año pasado hubo 30 asaltos masivos – protagonizados por cerca de 700 inmigrantes en cada uno – este año tan sólo ha habido dos saltos de grupos reducidos. «Nadie puede evitar que se produzcan intentos de este tipo pero hay que resaltar que este año ninguno ha logrado vulnerar el sistema de vallas», dijo el delegado, que reconoció que en Melilla «siempre se pueden producir intentos aislados pero que la presión «es la más baja desde el año 98».

Asimismo, aseguró que en las proximidades de la ciudad española no existen más de 150 inmigrantes dispuestos a entrar en Melilla, una cifra muy alejada a las dos mil personas que se contabilizaban hace un año. Añadió que en la zona fronteriza con Argelia puede haber como máximo 300 inmigrantes, frente a los diez mil de 2005.

Acuerdo con Argelia

Precisamente ayer se anunció que España y Argelia lucharán de manera conjunta contra la inmigración clandestina africana hacia Europa, según la vicepresidenta primera del gobierno español, María Teresa Fernández de la Vega, de viaje en Argelia. «Existe una gran convergencia de puntos de vista entre nuestros dos países para hacer frente a ese problema», declaró la número dos del Ejecutivo tras una reunión con el presidente Abdelaziz Buteflika.

De la Vega anunció la próxima creación de un comité mixto encargado de tratar y analizar la cuestión de la inmigración, y una reunión de la comisión de seguimiento para establecer un acuerdo bilateral de cooperación en materia de seguridad. Argelia y España «están trabajando intensamente sobre el tema de la seguridad y la cooperación, en términos de lucha antiterrorista», dijo De la Vega, que también comunicó a Buteflika «el deseo del rey y de la reina de España de efectuar una visita a Argelia durante el primer trimestre de 2007».