CHEMA RODRIGUEZ

SEVILLA.- El funcionario considerado el cerebro de la trama de venta de papeles a inmigrantes en Huelva trató de ocultar su negocio involucrando a algunos de sus compañeros en la Oficina Unica de Extranjería. Y estuvo a punto de conseguirlo.

Según ha podido saber EL MUNDO, M. B. C., de 40 años, intentó borrar los rastros de sus manipulaciones. ¿Cómo lo hizo? Accediendo al sistema informático con las claves de otros funcionarios para obtener los documentos que vendía a cambio de dinero o favores sexuales.

Hacerse con la clave de alguno de los compañeros no era difícil, ya que, según fuentes cercanas a los afectados, era común que todos los empleados conocieran las contraseñas de otros funcionarios en un marco de confianza mutua de la que se aprovechó el principal implicado.

Fuentes cercanas a la investigación, que dirige el magistrado titular del Juzgado de Instrucción número 4, Francisco Herves, aseguraron a este periódico que por ese motivo la Policía detuvo inicialmente a varios funcionarios más, reteniéndoles en los calabozos de la Comisaría Provincial de Huelva durante días.

Al menos tres funcionarios pasaron por las dependencias del Cuerpo Nacional de Policía bajo la sospecha de pertenecer a la trama de venta de papeles.

De vacaciones

Las fuentes consultadas explicaron que la mayoría de compañeros involucrados por M. B. C. logró demostrar ante la Policía que no habían sido ellos quienes falsearon los expedientes.

En concreto, uno de los empleados más veteranos de la Oficina de Extranjería pasó 48 horas en la Comisaría en calidad de detenido, acusado de pertenecer a la red, a pesar de que en el momento en que se habían falseado los papeles usando su contraseña se encontraba de vacaciones.

Sin embargo, el cerebro de la organización no levantó sospechas entre el resto de la plantilla de la Oficina Unica de Extranjería. De hecho, compañeros de M. B. C. que han trabajado con él durante años mostraron ayer su sorpresa por su detención, puesto que, señalaron, siempre demostró ser una persona honrada.

De las diligencias abiertas en el Juzgado también ha trascendido, pese al secreto de sumario, que los implicados facilitaban, previo pago, los permisos de residencia y trabajo sin contar con el preceptivo visado consular.

Fuentes cercanas al juez instructor apuntaron que el magistrado no tiene previsto, por el momento, ordenar la práctica de nuevas diligencias. Tampoco, añadieron estas fuentes, se van a realizar nuevas detenciones, al menos de forma inminente.