Declara que nunca consintió los maltratos y niega que se produjeran Declara que nunca consintió los maltratos y niega que se produjeran

Donostia. La abuela de las dos hermanas menores que fueron víctimas de las vejaciones sexuales a las que presuntamente les sometió durante dos años su abuelo, de etnia gitana, aseguró ayer que nunca consintió estos abusos y negó que hubieran tenido lugar.

La abuela de estas niñas declaró en la segunda jornada del juicio por estos hechos que se sigue a puerta cerrada en la Audiencia de Gipuzkoa, después de que el lunes la mayor de las hermanas, que ahora tiene 17 años, la acusara por videoconferencia de conocer los abusos, encubrirlos y maltratarla con un palo, igual que hacía su abuelo. Mientras, su otra hermana, que presuntamente era sometida a tocamientos por la noche, no ha podido declarar sobre lo ocurrido, ya que sufre un “trauma emocional”.

El fiscal y la acusación particular, que no imputan a la abuela delito alguno, piden penas que suman 35 años de cárcel para su marido por abusar sexualmente de ambas nietas en su domicilio y en un garaje de Hernani, entre el 17 de septiembre de 1998 y el 1 de agosto de 2000, cuando las menores tenían 9 y 4 años y sus padres, que estaban divorciados, cumplían condena en prisión.

En la vista celebrada el lunes, el imputado negó haber abusado de sus nietas, versión que ayer fue corroborada por su esposa. El padre de las niñas recordó que se enteró de las vejaciones sexuales tras salir de la cárcel.

El juicio se retomará el 19 de octubre con la práctica de diferentes pruebas periciales psicológicas que determinarán el grado de credibilidad de las menores. >efe