SAN SEBASTIÁN. DV. Las Juntas Generales de Álava aprobaron ayer una iniciativa, con los votos del PNV, PSE y EA, en la que solicitan a la Diputación el traslado a Vitoria de doce de los menores extranjeros no acompañados que se encuentran en Canarias. Además, en el texto acordado por los tres grupos, se considera Vitoria como lugar idóneo para albergar a los menores inmigrantes, ya que es en la ciudad donde se les puede ofrecer la mejor formación y asistencia.

El PP y el Grupo Mixto, que apoyan la creación de un centro de menores en Castillo Sopeña, en el municipio de Ribera Alta, votaron en contra de esta propuesta por considerar que son los técnicos y no los políticos los que deben decidir la mejor ubicación.

EB se abstuvo en la votación de este punto por entender que el centro de menores debe instalarse en los lugares donde se dispongan de los mejores recursos para la educación y reinserción de los jóvenes, independientemente de que sea Vitoria o no.

Las Juntas también reclaman a la Diputación que realice una campaña de sensibilización sobre los derechos de la infancia y la situación en la que viven los menores extranjeros en sus países de origen. También piden al Gobierno del Estado, al Gobierno Vasco y a la Diputación que firmen un convenio de colaboración del programa de atención a los menores extranjeros procedentes de Canarias.

Gipuzkoa, saturada

Las Juntas de Álava son las primeras que se manifiestan a favor de acoger a parte de los menores extranjeros llegados a Canarias en cayucos. Ahora será la Diputación la que deberá dar los pasos para hacer efectiva la decisión de las Juntas.

En el caso de Gipuzkoa, la Cámara territorial no se ha pronunciado sobre esta cuestión. La Diputación sí lo ha hecho a través de las titulares de los dos departamentos competentes sobre el tema de menores: Política Social y Derechos Humanos.

La Diputación guipuzcoana se ha limitado a señalar que las plazas existentes para el acogimiento de menores, sean extranjeros o no, se encuentran ocupadas. La saturación ha llegado al punto de que cuarenta menores extranjeros están alojados en pensiones.

Este dato fue expuesto la semana pasada en una reunión que mantuvieron los responsables de menores de las tres diputaciones con sus homólogos del Gobierno Vasco. El encuentro fue meramente informativo y no se tomaron decisiones.

Mañana habrá una nueva reunión, en la que estarán presentes los diputados forales competentes en la materia y el consejero de Asuntos Sociales, Javier Madrazo. En la misma podría adoptarse algún acuerdo sobre la cuestión.

La Diputación vizcaína ha sido hasta ahora la más reticente a acoger menores extranjeros. La institución foral ha llegado incluso a solicitar que parte de los que ahora están bajo su tutela sean repartidos entre otras comunidades autónomas, dado el colapso de su red de acogida.