Una ciudad multicultural

Diario de noticias de Gipuzkoa, 24-09-2006

EL Boulevard de la capital guipuzcoana acogió durante la mañana de ayer una gran cantidad de actividades, actuaciones y talleres de todos los tipos para celebrar, por cuarto año consecutivo, una jornada de sensibilización en la que el objetivo principal era pasarlo bien conociendo las necesidades y las realidades de otros países. “Queremos mostrar, de una forma lúdica y alegre, las distintas culturas que conviven en Donostia”, informaba la responsable de la delegación de Gipuzkoa de la secretaría técnica coordinadora de las ONGD de Euskadi, Erika Erkizia.

Por ello, todos los que decidieron acercarse hasta el Boulevarad, ya fueran niños o mayores, pudieron disfrutar de una mañana diferente. Por ejemplo, el teatro infantil y los juegos cooperativos hicieron las delicias de los más pequeños de la casa.

“Entre otras actividades hemos organizado un puzzle infantil, que tiene la forma de África, para que los niños, mientras lo montan, vayan conociendo cosas de ese continente”, explicaba una miembro de la ONG Haurralde, Itziar Arratibel. Además, añadía que su asociación desarrolla, sobre todo, proyectos para la mujer y la infancia. Por este motivo, colocaron un puesto en el que dos mujeres senegalesas mostraban la forma típica de hacer las trenzas del pelo en su país.

La ONG Sos Racismo, por su parte, instaló una verja similar a la que saltan los inmigrantes para poder llegar a Europa. “Con esta vaya, que la hemos titulado Los dos lados de la vaya , queremos denunciar el racismo que hay en nuestra sociedad”, declaraban dos miembros de esta ONG, Laura Casado y Silvana Luciani. Los voluntarios añadían que estas personas, tras saltar la vaya en la frontera, tienen que superar una segunda, la que se les impone aquí. “Ahora hay más racismo porque cada vez hay más inmigrantes”, apuntaba Casado. Por eso, esta asociación ha creado una dirección de correo electrónico respetaamig@gmail.com para que todas las víctimas o testigos de cualquier discriminación racista pueden ponerse en contacto con ellos.

Por otra parte, el puesto con la gastronomía típica de diferentes países de Latinoamérica fue, sin duda, uno de los que más personas recibió. “A la gente le gusta lo nuevo, lo diferente”, aseguraba una hondureña, Enma López mientras preparaba enchiladas, tortillas de maíz con berza y carne de típicas de Honduras.

Asimismo, una trabajadora social de Colombia, que se acercó a la zona para comer alimentos tradicionales de su tierra, apuntaba: “Lo que más me ha gustado de este acto es que la gente tenga tanto interés en probarla comida de mi país. Deberían realizar este tipo de actividades más a menudo”.

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