DANIEL PÉREZ / PILAR WALS/ÁGUILAS
Una patera con diez inmigrantes magrebíes, al parecer de procedencia argelina, fue interceptada anoche en una playa de Águilas. La llamada anónima de dos vecinos de la zona puso en alerta a la Policía Local y a la Guardia Civil a través del Servicio del 112. Instantes después, varias patrullas encontraron cerca de la playa del Pino, en la zona de levante próxima a Calabardina, a los pasajeros de la embarcación después de arrastrar la patera a tierra. Uno de ellos consiguió escapar. Ésta es la primera vez que las fuerzas del orden encuentran a unos inmigrantes desembarcando en una patera en el litoral murciano. Se cree que pudieron desviarse de su ruta. Pese a ellos, las fuerzas de seguridad tenían ayer indicios de que pueden llegar más pateras a la zona.

Los vecinos que los avistaron a las 10 de la noche desembarcando en la playa, a unos 8 kilómetros de Águilas, pudideron comprobar desde lejos cómo los inmigrantes llevaban los pantalones arremangados. Otras fuentes añaden que los magrebíes ya iban andado por una carretera cuando los interceptaron la Policía Local y la Guardia Civil. Presentaban en general bues estado de salud después de una travesía que duró entre 3 y 4 días, según explicaron después. No tenían documentación, pero sí dos elementos importantes: teléfonos móviles y un papel escrito en español que indicaba que debían preguntar por Cártitas o por Cruz Roja tras llegar a las costas españolas.

La embarcación tenía un motor y unos 4 metros de eslora, al parecer de escasa potencia, de unos 10 caballos. Fue trasladada acto seguido al puerto de Águilas. Dentro de la patera había barras de pan y paquetes de leche, así como otros restos de comida.

Excepto el huido, que está siendo buscado por las fuerzas de orden público, los nueve inmigrantes fueron trasladados al cuartel de la Guardia Civil de Águilas para prestar declaración. Al llegar a las instalaciones de la Benemérita, la mayoría se abrazaba y mostraba signos de alegría, según testigos presenciales.

La parte más curiosa de la historia se produjo a continuación. Al parecer, todos menos uno se expresaba a través del lenguaje de signos empleado por los sordomudos, y además de una forma primaria y torpe. El único que hablaba lo hacía en árabe. Esto llevó a la Guardia Civil a requerir los servicios de una traductora del lenguaje de signos. Almudera Reverte Soler, quien actuó de intérpete.

En el cuartel se presentarona simismo miembros de la brigada de Extranjería de Lorc. Después de las primeras pesquisas, y de varias declaraciones, dos de los inmigrantes quedaron detenido anoche en Águilas como presuntos cabecillas de la operación de traslado a España. El resto fue conducido a Lorca.

Ésta es la primera vez que detienen en las costas murcianas a los pasajeros de una patera. En una ocasión anterior se avistó una embarcación abandonada en la costa, sin que se pudiera precisar si se trataba de una operación de inmigranción ilegal o de narcotráfico.