Las mujeres se ocupan dos veces más de esas tareas que los hombres

Diario de Noticias, 18-09-2006

Pamplona. Los datos del Instituto Nacional de Estadística corroboran lo que es una impresión general: las mujeres acaban cargando con el cuidado de personas dependientes (padres, hermanos, hijos…) en mucha mayor proporción que los varones, en concreto, dos veces más. Así, frente a un 16,72% de mujeres con personas a su cargo los varones sólo son un 8,49%.

Es difícil detallar los datos pero a nivel estatal los informes hablan de que sólo un 6% de los dependientes son atendidos en este momento por la Seguridad Social (en Navarra es más alto) y el resto son cuidados por sus familias, fundamentalmente por mujeres, que forman parte por su edad de un grupo de difícil empleabilidad y que se verán beneficiadas por las medidas previstas en la normativa. El perfil del cuidador familiar hoy es una mujer con edad media de 53 años. Puede que muchas personas vayan a querer continuar siendo cuidadores en el entorno de la familia y recibirían las prestaciones económicas contenidas en la ley. Sin embargo, puede suceder también que estas mujeres cuando ya no tengan al familiar al que cuidar, si han recibido la formación y tienen la experiencia acreditada, pueden pasar de lo que es el trabajo informal a un trabajo formal e incorporarse al mercado laboral en un servicio de ayuda a domicilio, en un centro de día o en una residencia. En cualquier caso es posible que este Sistema Nacional de Dependencia y otros procesos de regularización e inspección saquen a flote un amplio espectro de economía sumergida que afecta sobre todo a la nueva población inmigrante femenina que en un porcentaje muy amplio no cuenta con contrato ni Seguridad Social.

No obstante todavía es pronto para hablar de cómo se puede articular todo esto ya que tanto por la parte de los ciudadanos beneficiados como personas cuidadas como por los cuidadores o cuidadoras hay mucho que definir e incluso, como sucede en Navarra, las instancias judiciales se sumarán a las admnistrativas a la hora de definir quién tiene derecho a cada ayuda, prestación o servicio directo. De momento sólo existe un catálogo que agrupa a las personas dependientes en tres categorías o grados: dependencia moderada, dependencia severa y gran dependencia. Desde FEAPAS ya se han adelantado a alertar que quizá 3.000 discapacitados navarros se puedan quedar fuera por baremo. >d.n.

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