La secretaria de Estado de Inmigración, Consuelo Rumí, consideró que cualquier modificación de la Ley de Extranjería debe hacerse desde el consenso y sin utilizar el fenómeno de la inmigración como arma arrojadiza. Rumí recordó que la vicepresidenta primera del Gobierno comenzará la próxima semana los contactos con los grupos parlamentarios, con quienes «se hablará absolutamente de todo» a partir del «consenso, el diálogo y la reflexión serena». Rumí hizo estas declaraciones a su llegada a la conferencia política del PSOE, que elaboró un documento en el que se apuesta por una inmigración ordenada y una política migratoria «ambiciosa, pero también realista».

Entre tanto, el mar sigue conbrandose víctimas. Salvamento Marítimo rescató ayer el cadáver de un subsahariano que murió a bordo de un cayuco que intentaba arribar a Tenerife. En él viajaban otros 56 inmigrantes. Seis de ellos fueron trasladados a distintos centros sanitarios por su precario estado de salud. El inmigrante falleció a causa de la deshidratación, según informó ayer la Delegación del Gobierno en Canarias.

Según las fuentes, «salieron de Senegal y tuvieron una travesía muy mala; prácticamente todos estaban en mal estado, con deshidratación e hipotermia».La barcaza había sido localizada a unas 60 millas de Tenerife desde el avión ‘Serviola 1’ de Salvamento Marítimo, por lo que partió a su encuentro el remolcador ‘Punta Tarifa’ que lo condujo hasta el puerto tinerfeño de Los Cristianos, donde llegó a las 06.00 horas de ayer.

No muy lejos, los 159 inmigrantes asiáticos rescatados en la noche del jueves en el barco ‘Al Mari’ continúan alojados en una nave del puerto de Santa Cruz de Tenerife, mientras la policía procede a su identificación para determinar su país de origen a fin de ser repatriados lo antes posible. En las dependencias de la Guardia Civil continuaron también los interrogatorios a los cinco tripulantes del ‘barco negrero’, y que al parecer son de origen subsahariano.

Nuevos vuelos

Según fuentes de la Delegación del Gobierno, a primeras horas de esta tarde partieron dos aviones de Air Europa con destino a Senegal con 180 indocumentados, así como un centenar de agentes policiales que les custodian durante las horas de vuelo. Mientras, otros tres vuelos han repartido por diversos centros de la Península a 339 inmigrantes, que han salido en varios vuelos que han partido desde el Aeropuerto de Fuerteventura.

Dos vuelos han tenido como destino Madrid con 59 y 60 inmigrantes irregulares cada uno. Otro se ha dirigido a Málaga con 40 indocumentados, acompañados por los efectivos policiales.

El secretario general de la Confederación Española de Policía, CEP, Agustín Brito, denunció que tanto las derivaciones como las repatriaciones de inmigrantes irregulares requieren de un importante número de efectivos policiales, lo que provoca que «se esté trayendo incluso personal de Atención al Ciudadano de la Policía Nacional para poder realizar este y otros servicios relacionados con la inmigración irregular en toda Canarias, y no hay agentes para patrullar.

Precisamente, la prensa senegalesa se hacía eco ayer de las primeras dificultades en los vuelos de repatriación de inmigrantes indocumentados desde las Islas Canarias a Senegal. Así, el comandante de la región norte, el coronel Sidya Diédhiou, y sus hombres «se vieron obligados a utilizar la violencia y negociar con ellos», indicó el diario ‘Walf Fadji’.