Madrid – Las duras descalificaciones con las que la dirección del PSOE
inauguró ayer su Conferencia Política fueron valoradas en el PP como la
constatación de que los socialistas no tienen más proyecto que la
destrucción de la «única alternativa eficaz» que hay hoy en día para
resolver los problemas. «Son una señal inequívoca de la falta de proyecto
futuro que tiene el PSOE», sentenció el secretario general de los
«populares», Ángel Acebes.
   El «número dos» del
principal partido de la oposición instó al Gobierno y a los socialistas a
dedicarse a resolver problemas, como la llegada masiva de inmigrantes
irregulares, la inseguridad ciudadana o la subida del precio de la
vivienda, en lugar de «hacer conferencias y eslóganes».
   Aseguró que el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, «a
través de la crítica fácil lo que intenta es que desaparezca la percepción
de que hay una alternativa».
   Frente parlamentario.
   El PP centrará en la inmigración y en la opa sobre Endesa el grueso de las
preguntas de control al Gobierno del próximo miércoles en el Congreso, una
sesión que, sin embargo, no acogerá el tradicional «rifirrafe» entre el
jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder del PP,
porque éste se reúne ese día con el presidente de la Comisión Europea,
José Manuel Durao Barroso, para presentarle, precisamente, su alternativa
en inmigración.
   Así, será Acebes el encargado de abrir la
ofensiva parlamentaria preguntando a la vicepresidenta primera, María
Teresa Fernández de la Vega, si considera que el Ejecutivo «responde con
eficacia a los principales problemas de España», una cuestión similar a la
que ya le formuló esta misma semana.
   Por su parte, el portavoz
parlamentario del Grupo Popular, Eduardo Zaplana, le preguntará si la
actitud del Gobierno ante los pactos de Estado «es la mejor base para
proponer nuevos acuerdos». Esta pregunta obligará a que salga a relucir el
pacto sobre inmigración con el que el Gobierno movió ficha al verse
descolocado tras el paquete de propuestas que presentó Rajoy para hacer
frente a la crisis de los «sin papeles». Fuentes de la dirección «popular»
mantienen que el PP no puede entrar en el juego de ese pacto con el que el
Ejecutivo busca encubrir sus «errores».