España repatrió ayer a 50 inmigrantes senegaleses desde Fuerteventura entre grandes medidas de seguridad. 74 policías, varios de ellos valencianos, custodiaban a los deportados. La Guardia Civil interceptó anoche un barco negrero con 216 inmigrantes paquistaníes y asiáticos a bordo frente a las costas de Tenerife. El primer avión fletado por Air Europa con destino a Senegal despegó sobre las 20:00 horas de ayer desde el aeropuerto de
El Matorral,
en Fuerteventura, con destino al aeródromo de Saint – Louis (a 270 kilómetros al norte de la capital). En el aparato viajaron 50 inmigrantes, custodiados por 74 policías, varios de ellos procedentes de la Comunitat Valenciana. Los
sin papeles
subieron al avión uno a uno, esposados y custodiados por los agentes.


Estaba previsto el despegue de otro avión para las 21:00 horas, con idéntico pasaje. Sin embargo, dado que en el aeropuerto senegalés son imposibles los aterrizajes nocturnos, el vuelo fue aplazado hasta hoy.


El miércoles, Dakar se había negado a aceptar un primer contingente de 120 irregulares procedentes de Fuerteventura. El ministro del Interior senegalés, Ousmane Ngnom, aseguró que la repatriación se había pospuesto por motivos técnicos. El ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, precisó que el argumento oficial del Gobierno de Dakar es que se había programado el aterrizaje del aparato en el aeropuerto de Saint – Louis, cuando este aeródromo carece de condiciones suficientes para llevar a cabo operaciones nocturnas.


Diversas fuentes de Exteriores, Interior y Trabajo matizaron que, al margen de las explicaciones oficiales sobre los problemas del aeropuerto, el Gobierno de Senegal ha advertido a Madrid a través de “cauces formales e informales” de que no admitirá más vuelos si el Gobierno español no mantiene en secreto estas operaciones.


Barco negrero

Por otro lado, un barco negrero que llevaba a bordo a 216 inmigrantes paquistaníes y de otras naciones asiáticas fue interceptado ayer por la Guardia Civil, frente a las costas de Tenerife, en la zona denominada de Las Galletas, según informó la Delegación del Gobierno en Canarias. Efectivos de la patrullera ‘Río Gallo’ subieron al pesquero, que no enarbolaba bandera, para inspeccionarlo. De 40 metros de largo, el buque se encuentra en aparentes buenas condiciones.


Según las mismas fuentes, si no hay problemas de salud entre los viajeros a bordo y el barco puede seguir navegando es posible que se les niegue la entrada en cualquier puerto español.