Las hemerotecas españolas han acumulado en los últimos cinco años muchas noticias sobre los Latin Kings, y en la mayoría aparecen palabras como ‘pistola’, ‘cuchillo’ o, al menos, ‘bate’. En Estados Unidos, la trayectoria periodística de esta organización es mucho más larga y se remonta hasta su fundación, allá por los años 40 en Chicago, pero las hazañas que les atribuyen los periódicos suenan muy similares: las autoridades consideran a los Kings una peligrosa banda callejera y su nombre da más miedo que otra cosa. Pero la jornada de ayer supuso un punto de inflexión en la historia del grupo, al menos en Cataluña, ya que la rebautizada Organización Cultural de Reyes y Reinas Latinos se presentó oficialmente como asociación cultural reconocida por la Generalitat.

«En mi pueblo, en Ecuador, las bandas son las que tocan música», ironizó su presidenta, ‘queen’ Melody Jaramillo, que aseguró que nunca se han considerado un ‘gang’ juvenil. Ahora, como entidad legal, su fin consiste en promover la cultura latina y favorecer la integración de los inmigrantes hispanoamericanos, de modo que tengan «igualdad de oportunidades» con los autóctonos. De paso, también aspiran a «quitar el pensamiento negativo» que actualmente «discrimina» y «criminaliza» el nombre de los Kings.

«Amistad» con los Ñetas

Jaramillo admitió que el proceso de legalización, iniciado hace año y medio, ha sido «largo, difícil y con mucho esfuerzo». En la actualidad, la rama catalana de los Latin Kings cuenta con doscientos miembros, aunque las altas y bajas son constantes. Los afiliados pagan una cuota – «la voluntad» – y no tienen que cumplir ningún requisito de edad o nacionalidad: de hecho, aunque lo que más abunda son los ecuatorianos, también hay algún catalán. Jaramillo resaltó que la asociación está «excluida de todo ánimo de lucro» y puntualizó que todavía no han solicitado ninguna subvención. Entre las actividades que ya llevan a cabo o planean emprender figuran la edición de un disco de hip hop, la filmación de un documental y los recorridos por las calles para ayudar a los más necesitados.

¿Se ha metamorfoseado el grupo en algo más parecido a las hermanitas de la caridad que a una amenazadora banda callejera? El supuesto giro ha suscitado recelos en los partidos de la oposición, que han criticado la candidez del Gobierno catalán, pero ‘queen’ Melody arremetió ayer contra esas insinuaciones: «No han pasado por lo que hemos pasado y no ven los problemas que causa abandonar tu hogar», argumentó. Según su versión, no sólo los Reyes Latinos son «como una familia, como hermanos», sino que ese amor alcanza incluso a sus eternos rivales, los Ñetas: «Tenemos muy buena amistad con ellos», aseguró. Los periódicos de los próximos meses pondrán a prueba a esta nueva banda de bienhechores.