Las fuerzas de seguridad del Estado interceptaron ayer en Melilla a nueve inmigrantes ocultos entre las atracciones feriales, e identificaron a 80 que lo intentaron durante la llamada
Operación Feriante
, que consiste en vigilar la salida de las atracciones que participan en las fiestas locales de la ciudad autónoma para evitar que los ‘ilegales’ –la mayoría magrebíes– se oculten en ellas para acceder a la Península.


Según informó la Delegación del Gobierno en Melilla, la redada fue el sistema principal que emplearon tanto la Policía Nacional como la Policía Local en el interior del recinto de la feria como en los alrededores de la Plaza de España y el Puerto. El método de la Guardia Civil fue un poco más sofisticado y se llama
Microsearch
, que utiliza un detector de pulsaciones capaz de encontrar un ser humano vivo en cualquier escondite.


La
Operación Feriante
, que implicó una mayor vigilancia durante el desmontaje de las atracciones para impedir que los inmigrantes se ocultasen y llegar así a la Península, consiguió evitar que 89
sin papeles
viajasen como polizones en los ferrys y pasaran clandestinamente a la Península.


Dos cayucos en Canarias

Por otro lado, los dos cayucos que ayer llegaron a Canarias dejaron 160 inmigrantes indocumentados, entre ellos al menos dos menores de edad. La primera barcaza que arribó con inmigrantes subsaharianos indocumentados lo hizo en torno a las 00.15 horas, y en ella llegaron 118 personas a la dársena comercial Los Llanos del puerto de Santa Cruz de Tenerife.


El segundo cayuco, que fue avistado durante la tarde de ayer a unos 500 metros del Faro de Maspalomas, estaba ocupado por 42 personas, entre ellas dos menores de edad, y llegó al muelle de Arguineguín. Todos los inmigrantes llegaron en aparente buen estado de salud. La llegada de la segunda embarcación fue presenciada desde la playa por los efectivos de tres patrullas terrestres de la Guardia Civil. Una patrullera se encargó de rescatar y conducir a los inmigrantes de origen subsahariano hasta el muelle.