Durante el año pasado, 48.037 personas arrastraron sus maletas hasta la capital malagueña para cambiar de residencia. De la totalidad de los desplazamientos que absorbió la ciudad, 35.545 estuvieron protagonizados por españoles y 12.492 por extranjeros. La mayoría de nacionales y foráneos – el 56% – se mudaron desde otro municipio de la provincia. Fuera de la Costa del Sol, fueron Madrid – 3.429 – , Cádiz – 2.088 – y Córdoba – 1.359 – las tres ciudades que más inmigrantes derivaron.

Así se desprende de la última estadística de variaciones residenciales publicada por el Instituto Nacional de Estadística. Los datos del INE aportan una radiografía del total de movimientos que tuvieron como origen o destino la provincia de Málaga. Según este informe, uno de cada tres desplazados hasta la capital durante el pasado año tenía entre 25 y 34 años. El siguiente colectivo más numeroso, por edad, fue el de los menores de 16 años, que protagonizó otro 17% de las migraciones hacia Málaga.

Emigrantes

En el capítulo de emigraciones – al igual que en el de inmigraciones – , el 63,5% de los desplazamientos se quedaron en casa. Así, el grueso de quienes abandonaron la capital se marcharon a vivir a otra localidad malagueña. Fuera de la provincia, Andalucía fue el destino más solicitado por los emigrantes autóctonos. Según refleja la estadística de variaciones residenciales, el 37% de las personas que dejaron la provincia en 2005 se decantaron por un destino de la región.

Cádiz, Sevilla y Granada fueron, por este orden, las tres provincias andaluzas preferidas por los 31.019 españoles residentes en Málaga que abandonaron la Costa del Sol para modificar su domicilio el pasado año. Los que pusieron sus miras más allá de la comunidad autónoma eligieron grandes capitales, como Madrid y Barcelona, seguidas de islas como Tenerife o las Baleares. Por su parte, los 11.463 extranjeros residentes en la capital que optaron por mudarse se decantaron por Madrid y Alicante.

Menor demanda

A la cola de este listado de destinos más demandados figuran las provincias de Soria, Teruel y Cuenca que, en 2005, sólo dieron la bienvenida a 6, 9 y 22 malagueños, respectivamente. Los archivos de estadística del INE permiten comparar estos datos con los de 1999. El cruce de las cifras de ambos periodos muestra cómo en los últimos cinco años ha aumentado de forma significativa la presencia de malagueños en islas como Las Palmas y Baleares, así como en Ceuta y Melilla. Por el contrario, han descendido a cerca de la mitad los desplazamientos desde Málaga a Córdoba, La Coruña o Pontevedra.