Así fue el blindaje policial que apagó el fuego en Torre Pacheco: interceptados radicales de Rumanía e Italia y pacto con los ultras del fútbol para que sólo viajasen "los cachorros"

Las fuerzas de seguridad alejaron del pueblo a ultras internacionales y consiguieron que la concentración que pretendía ser una "cacería" quedase en nada

El Mundo, Andros Lozano, 16-07-2025

Alrededor de un centenar de ultras procedentes de distintos países de Europa llegaron en tren hasta Murcia en las últimas 24 horas, según fuentes policiales de toda solvencia consultadas por EL MUNDO. Después, estos grupos se desplazaron en autobús hasta Torre Pacheco, a donde llegaron a primera hora de la mañana de ayer.

El dispositivo policial establecido para tratar de contener la llegada de radicales de extrema derecha logró detectarlos e identificarlos cuando ya estaban en Torre Pacheco. Las citadas fuentes añaden que varios de ellos procedían de Italia y de Rumanía, aunque no descartan que algunos de ellos pudieran estar residiendo en otros países de la Unión Europea o, incluso, en territorio español.

A través de gestiones policiales directas con ellos, se les convenció para que abandonaran la localidad. A primera hora de la tarde del martes, «la mayoría de ellos» ya no estaba en el citado municipio murciano.

Su objetivo era sumarse a la «cacería» que distintos grupos neonazis convocaron a través de las redes sociales para los días 15, 16 y 17 de julio, en respuesta a la paliza propinada por tres marroquíes de 19, 20 y 21 años a un vecino del municipio, Domingo, de 68 años, el miércoles de la semana pasada cuando paseaba cerca del cementerio de la localidad. Los tres ya han sido detenidos y uno de ellos, el presunto autor material del acto violento, enviado a prisión tras ser apresado en Rentería (Guipúzcoa) cuando planeaba su huida a Francia. La delegada del Gobierno en Murcia, Mariola Guevara, confirmó ayer que el detenido es residente en Barcelona.

La misma estrategia siguió la Guardia Civil con el líder de Desokupa, Daniel Esteve, que se presentó en el municipio durante la tarde con otras 40 personas. El propio Esteve confirmó que al llegar a Torre Pacheco fueron identificados y se les informó de que «por motivos de seguridad» se les iba a escoltar lejos del pueblo. Esteve achacó la decisión a una orden directa del ministro del Interior. «Nosotros no nos vamos, nos van a acompañar a la salida por orden de Marlaska», dijo Esteve en un vídeo grabado en la localidad poco antes del inicio de la concentración.

A las ocho de la tarde se inició finalmente la protesta (no autorizada) a las puertas del Ayuntamiento de Torre Pacheco. Resultó un pinchazo. Apenas un centenar de manifestantes, entre los que era era fácil observar a radicales ultras con tatuajes y simbología carlista.

Este periódico ha podido conocer también que «ultras históricos» de Madrid, Barcelona o Valencia, con vínculos con bandas de aficionados radicales de equipos de fútbol como el Atlético de Madrid o el Real Madrid, han llegado a «un acuerdo entre viejos» para no desplazarse hasta Torre Pacheco. En cambio, sí habían dado el visto bueno para que «sus cachorros» sí pudieran estar presentes este pasado martes en las concentraciones en el pueblo. Esos radicales históricos, añaden las fuentes, «podrían haber reventado» el cordón policial porque tienen conocimiento de «tácticas de guerrilla urbana».

Algunos de los asistentes a la manifestación negociaron la policía si debían abandonarla.
Algunos de los asistentes a la manifestación negociaron la policía si debían abandonarla.ABEL F. ROSARABA PRESS
La semana pasada, el colectivo Deport Them Now (Deportarlos ahora) fue el principal grupo convocante de las protestas que se prevén hasta este jueves. Animó a sus seguidores a unirse a una «cacería» que, según este colectivo, consistía en una «investigación directa con el fin de dar con ellos [se refería a los autores de la paliza]» y en darles «justicia directa para reunirlos con Alá».

LA PROTESTA
Esa «cacería» derivó finalmente en una concentración con muy poca asistencia, y en la que por momentos daba la sensación de haber más periodistas y reporteros gráficos que asistentes. Hasta el centro de Torre Pacheco se desplazaron en torno a una decena de miembros de Frente Obrero, otros pequeños grupos de estética neonazi y varias decenas de vecinos de la localidad, aunque de manera dispersa.

El grupo sólo se concentró cuando una reportera del programa Malas Lenguas de La 2 comenzó una conexión en directo. Los manifestantes la rodearon y persiguieron al grito de «manipuladora», «perra» o «vendida al Gobierno». Se vivieron ahí momentos de mucha tensión. Varios periodistas tuvieron que acompañarla hasta una zona donde había desplazados varios furgones de la Guardia Civil.

Los momentos de mayor tensión se vivieron durante la persecución a una periodista de TVE.
Los momentos de mayor tensión se vivieron durante la persecución a una periodista de TVE.ABEL F.ROSARABA PRESS
A Daniel, uno de los asistentes, la Guardia Civil le pidió identificarse por «increpar» a la reportera de TVE. «Le estoy diciendo la verdad, yo no la he increpado. Le he dicho que es una vendida del Gobierno y una manipuladora», intentaba rebatir el manifestante identificado.

EL MUNDO fue testigo durante la concentración de cómo un grupo de cinco hombres de estética radical entablaron conversación con un agente policial para saber si lo más aconsejable era marcharse. El policía les respondió que podían hacer lo que consideraran, pero añadió: «Sólo os pido que no la liéis». Pasados 40 minutos de la marcha, algunos asistentes ya la abandonaban.

Mientras tanto, varios chicos de ascendencia marroquí pero con nacionalidad española, de los que en los últimos días han salido las calles del barrio de San Antonio, con mayoría de población marroquí, se retiraban a sus viviendas: «Hoy nos quedamos en casa. Es lo mejor para nosotros y para el pueblo».

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