El PSdeG ha registrado una batería de iniciativas con el objetivo de conocer qué medidas está tomando la Xunta para garantizar la acogida de los 317 menores migrantes no acompañados que está previsto que lleguen a Galicia, según la propuesta del Gobierno a las comunidades.

La diputada socialista Silvia Longueira, a través de las iniciativas registradas, exige conocer qué líneas de trabajo está desarrollando para acoger menores migrantes, qué medios y recursos está movilizando la Consellería de Política Social, y qué planificación tiene prevista la Xunta en este ámbito.
«Sorprende que se pida planificación á Xunta, cando a planificación que ten trasladado o Goberno de España á Xunta é nula. A día de hoxe, non coñece cando se prevén trasladar estes menores, como virán a Galicia e as súas características», afirman fuentes de la Consellería de Política Social. La única información que tienen del ministerio es que «non vai achegar financiamento, obrigando ás comunidades a asumir o 100 % do custo do acollemento».

Critican desde Política Social el modelo de acogida del Gobierno, «que consiste en apiñar a 250 menores solicitantes de asilo nun macrocentro». Frente a eso, defienden el modelo gallego, «propio, totalmente integrador, e non vai poñelo en risco pola imposición do Goberno de España», motivo por el que presentaron un recurso ante el Tribunal Constitucional.

Los socialistas proponen que se ponga en marcha un archivo de historias de vida de los menores acogidos, con el objetivo de visibilizar sus experiencias, sensibilizar a la sociedad y combatir los discursos de odio.

Longueira pidió esta información después de que la conselleira de Política Social, Fabiola García, remarcase que los servicios de acogida en la comunidad no tienen capacidad para acoger a más niños, al estar con una sobreocupación del 108 %. La socialista reprocha que «tras as polémicas declaracións de Vox sobre a deportación de oito millóns de persoas migrantes», la Xunta y el PPdeG se sumen a la negativa a participar en el sistema de acogida, escudándose en «procedementos protocolarios».

La Xunta pide al Gobierno que vuelva a la vía de consenso y diálogo, y afirma que no va a aceptar «unha nova imposición» con este reparto de menores, en el que el ministerio deja fuera al País Vasco y a Cataluña.

«A xenofobia está chamando á porta», advirtió Longueira, que percibe en los postulados de la extrema derecha un ataque directo a la convivencia democrática. La diputada socialista considera que el discurso de la ultraderecha está contaminando la acción política del Partido Popular, «tamén en Galicia», dijo, ya que la Xunta «escúdase en cuestións procedementais para eludir a súa responsabilidade coa infancia migrante, nun momento no que máis falta fai liderazgo político e valentía institucional».

No se puede construir convivencia desde el miedo ni desde el rechazo, aseguró la socialista: «É responsabilidade das Administracións dar unha resposta humana, coordinada e solidaria».