La diputada de Asuntos Sociales insiste en que tratará de convencer a los vecinos, que mantienen su rechazo al proyecto La diputada de Asuntos Sociales insiste en que tratará de convencer a los vecinos, que mantienen su rechazo al proyecto

La diputada foral de Asuntos Sociales, Ainhoa Domaica.Foto: josé ramón gómez

vitoria. Mientras que la Diputación Foral de Álava apuesta por un “entorno aislado de la zona urbana” para ubicar el centro de acogida de menores inmigrantes en Álava, los grupos de la oposición en Juntas Generales denunciaron ayer la decisión de alejar a este colectivo de los principales recursos para su desarrollo, “que se encuentran en Vitoria o en una población con mayor número de habitantes”.

La diputada foral de Asuntos Sociales, Ainhoa Domaica, insistió ayer en que la localidad de Castillo – Sopeña “reúne todas las condiciones” para la primera fase de acogimiento que calificó de “proceso de inmersión”. Según explicó, este colectivo necesita un lugar con pocas interferencias externas, donde reciban cursos intensivos de alfabetización, de habilidades domésticas y talleres pre – laborales. En una segunda fase serían trasladados a la capital alavesa.

A pesar de que el pasado lunes el Ayuntamiento de Ribera Alta rechazó en el Pleno Municipal la creación del centro, Domaica afirmó ayer que la Diputación está “abierta a una total colaboración con la Corporación municipal y con los vecinos para volverles a explicar la necesidad de que este centro se sitúe allí”.

Desde el PNV, María Jesús Agirre, valoró que este colectivo necesita un lugar en el que existan infraestructuras que posibiliten su integración social. “Vitoria dispone de todos los recursos en materia educativa, cultural, laboral y afectiva que necesitan”, resumió. Por ello, Agirre no encuentra “lógico” que la Diputación insista en alejarlos de la capital alavesa.

El cumplimiento de la Ley del Menor es para Mikel Mintegi, de EA, el aspecto primordial en esta polémica. La Diputación, que es responsable del menor, “debe garantizar que disponga de los recursos sociales necesarios para su desarrollo”. En este sentido, cuestionó que Castillo – Sopeña sea el lugar con mejores recursos sociales para este colectivo.

En representación del PSE, Txarli Prieto definió ayer como “un segundo error” la nueva propuesta de ubicación del centro, tras el intento fallido de construirlo en Nanclares de la Oca. El proyecto “debería dejar de ser una fuente de conflictos entre pueblos de Álava y la Diputación”, afirmó. En este sentido, opinó que si se continúa insistiendo en trasladarlo a pueblos con un número bajo de habitantes, “la polémica continuará”.

Según Ritxar Bacete, de EB, levantar el centro en una zona aislada es una “aberración política inadmisible”, ya que es en Vitoria donde disponen de oportunidades para integrarse en la sociedad. Este grupo exigirá la comparecencia de Ainhoa Domaica en las Juntas Generales con el fin de que pueda explicar las razones que han llevado a su departamento a trasladar a estos menores a un lugar aislado de la capital alavesa.

El representante del Grupo Mixto, Ernesto Ladrón de Guevara aprobó la nueva ubicación del centro “si se trata de algo temporal”, ya que la integración de los menores “debe desarrollarse en un núcleo poblacional mayor, como Vitoria”.

crítica vecinal Por su parte, Javier Beltrán de Guevara, portavoz de la plataforma en contra del centro de menores, manifestó ayer tras la comparecencia de Ainhoa Domaica que “escucharemos lo que nos venga a decir, pero no nos va a convencer de nada”. El representante de los vecinos de la zona expresó que “el gabinete de Rabanera está huyendo hacia atrás, en lugar de afrontar el problema pretenden alejarlo lo más posible de la capital”. Además, desde la plataforma aprovecharon para defender al alcalde de Ribera Alta, Jesús Berganzo, al expresar que “estamos convencidos de que ha actuado de buena fe, creemos que desde la Diputación le ocultaron el tipo de gente que va a venir al centro”.