La Policía Nacional ha desarticulado una organización criminal que se dedicaba a falsificar contratos de trabajo a cambio de 2.000 euros para facilitar a ciudadanos extranjeros la obtención del permiso de residencia y trabajo en España. A los arrestados se les imputan delitos de falsedad documental, favorecimiento de la inmigración irregular y pertenencia a organización criminal. Tras pasar a disposición judicial, todos han quedado a la espera de imputación formal.

La investigación comenzó el pasado mes de marzo cuando los agentes detectaron que una empresa, con sede en Madrid, estaba ofreciendo contratos de trabajo falsos a inmigrantes en situación irregular. La organización captaba a los interesados y les pedía 2.000 euros a cambio de un supuesto empleo. Con ese dinero, tramitaban un precontrato y lo presentaban junto a la documentación de la empresa para solicitar el permiso de residencia y trabajo.

Una vez obtenida la autorización, se formalizaba el contrato y se daba de alta al trabajador en la Seguridad Social, paso necesario para completar el proceso. Pero el empleo no existía: no había tareas, ni funciones, ni salario real. La empresa no asumía ningún gasto, ni siquiera las cotizaciones, ya que también corrían a cargo del trabajador.

Con el avance de la investigación, los agentes accedieron al historial de empleados de la empresa y descubrieron que, en total, se había dado de alta a diez personas, todas extranjeras y en situación irregular. En la actualidad, solo quedaba una trabajadora activa. Ninguno de los diez llegó a desempeñar labor alguna dentro de la propia empresa.