Martín pide al Estado que actúe con la misma velocidad con la inmigración que en el Líbano

Exigió más centros de internamiento en la Península cuando se supere la capacidad de las islas

Canarias 7, 06-09-2006


Santa Cruz de Tenerife
El presidente canario, Adán Martín, pidió hoy al Gobierno central una respuesta “inmediata a los escenarios de riesgo” de la inmigración “con la misma velocidad” con que ha actuado en el Líbano, y exigió que se habiliten centros de internamiento en la Península cuando se supere la capacidad de las islas.

Así lo manifestó Martín en su réplica a los portavoces parlamentarios durante el pleno que celebra la Cámara regional para debatir sobre la inmigración ilegal en Canarias, en donde criticó además el rechazo del Ministerio de Defensa a facilitar los cuarteles en La Gomera y El Hierro para acoger inmigrantes indocumentados.

El jefe del Ejecutivo regional reclamó la apertura de estos acuartelamientos, puesto que ambas islas carecen de recursos para acoger a los inmigrantes que llegan en cayucos y “no se puede resolver la situación acogiéndolos en un gimnasio”.

Consideró también que si el fenómeno se volviera “imparable” habría que tener previstos los medios “para reconducirlos a su lugar de partida”.

A su juicio, el Gobierno central ha fracasado “históricamente” en su política hacia Africa y advirtió de que si no se da sensación de firmeza “va a ser difícil que se crea al Estado y se va a causar un cierto descrédito internacional, una pérdida de confianza y un mayor número de inmigrantes”.

Añadió que el Ejecutivo español “ignora” la realidad africana y también “lo que una y otra vez decimos desde Canarias” y argumentó que hay que ser consciente de los riesgos que se corren “con cientos de jóvenes privados de su libertad en centros provisionales y sin suficientes condiciones de seguridad”.

“En la Comisaría de la Policía Nacional de Playa de las Américas, al sur de Tenerife, hay una dotación mínima de agentes con casi mil inmigrantes, que tienen un comportamiento ejemplar, pero evidentemente hay una situación de riesgo”, afirmó Martín.

El Gobierno canario, advirtió, no va a adoptar una política de pasividad aunque sí ofrece cooperación en este asunto, pero se preguntó también hasta cuándo se va a permitir que haya miles de senegaleses en espera de ser repatriados o hasta cuándo hay que esperar por los resultados de las reuniones en Europa de la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega.

También aseguró que el Gobierno español incumple sus obligaciones internacionales en materia de menores y cuestionó a qué espera el ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, para modificar las leyes de extranjería, responsabilidad penal del menor y enjuiciamiento criminal.

El Estado debe cumplir con el reagrupamiento familiar de los menores extranjeros y negociar “con firmeza” que cada país “recoja de nuevo a sus menores” y mientras tanto debe distribuirlos por las comunidades autónomas, sobre lo cual Canarias trabaja en una propuesta concreta, añadió.

“Han llegado más de 21.500 inmigrantes irregulares a Canarias, diez por hora, hemos batido todos los récords y así se lo dije al presidente José Luis Rodríguez Zapatero en La Mareta, porque a veces hay que poner cara de perro”, afirmó Martín, quien dijo que tampoco es cierto que en las islas no se quede “ni un inmigrante subsahariano”.

Apuntó que el Gobierno central ha ido siempre “a remolque” y consideró, en alusión a la intervención del presidente del grupo parlamentario Popular, José Manuel Soria, que la política africana del PP “consistió en mandar comandos al islote de Perejil”.

Adán Martín aseveró que el problema de la inmigración no se resuelve con golpes de efecto ni se puede usar este asunto demagógicamente para desgastar a los adversarios políticos, pues por el contrario exige “acuerdo, consenso, diálogo y cooperación con los países de origen y de tránsito”.

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