Que nos traten como al Líbano

Canarias 7, 06-09-2006


Las Palmas de Gran Canaria

Los canarios llevamos muchos años pidiendo a los sucesivos gobiernos de España, primero del PP y ahora del PSOE, que pongan los medios necesarios para cerrar la frontera y que no sigan entrando inmigrantes ilegales. Desgraciadamente, no nos han hecho caso. Por eso, este verano hemos sufrido una verdadera invasión de inmigrantes que llegaron en cayucos y pateras y desembarcaron en las siete islas. Sólo en agosto llegaron 5.000, 20.000 en lo que llevamos de año, y siguen sin tomárselo en serio. El Presidente del Gobierno de Canarias, Adán Martín, todavía no se ha plantado, y no sé a qué está esperando. Zapatero se permitió el lujo de pasar parte de sus vacaciones en Canarias, mientras se batía el record de llegada de irregulares en un solo día, más de quinientos, y ni se inmutó. Se fue y no hizo nada. El pasado sábado llegaron casi 700, y la suma sigue aumentando.

Los canarios estamos abandonados de la mano de Dios, y de ZP, mientras vemos impotentes cómo nuestra sociedad se destruye día a día por la llegada incontrolada y masiva de personas de diferentes lenguas, culturas y religiones, imposibles de integrar de manera adecuada y de forma rápida. Nuestra atención sanitaria ha empeorado porque el Servicio Canario de Salud tiene también que ocuparse de los inmigrantes, que llegan en un pésimo estado físico y con las enfermedades típicas que padecen en sus países de origen, que aquí ya estaban superadas. Nuestros hijos y sus profesores conviven en unas aulas atiborradas con niños de diferentes nacionalidades, que ni tan siquiera hablan español, por lo que el rendimiento global del grupo ha empeorado. Nuestras calles se están llenando de personas que no pueden trabajar en nada, porque no tienen papeles, salvo la orden de expulsión a ninguna parte en el bolsillo, y tampoco un sitio dónde poder dormir o asearse. Estamos perdiendo nuestra identidad como pueblo, sin darnos cuenta, y sin que nadie nos pregunte si queremos que esto suceda. Y yo no quiero.

Y ahora me entero que ZP va a enviar 1.200 soldados españoles al Líbano, para proteger las fronteras de ese país que está al otro lado del mundo. ¿Y nosotros qué? ¿Quién vigilará las nuestras? ¡Qué desfachatez! ¡Qué rápido accedió a mandar el ejército al Líbano, mientras nosotros llevamos años pidiéndole ayuda sin que nos haga ni puñetero caso! ZP nos trata peor que a los libaneses, los bosnios, y los afganos, para los que no escatima ningún medio. Si esto sigue así, los canarios deberemos empezar a preguntarnos de qué nos sirve estar en un estado sin fronteras, en el que da lo mismo estar dentro que fuera.

Y Adán, por Dios, despierta ya, o mándate a mudar, porque en los próximos 9 meses, que son los que faltan para las elecciones, pueden entrar en Canarias más de 50.000 inmigrantes. Vete para Madrid y si no te traes para abajo al ejército, no vuelvas tú. Sigue para Bruselas y denuncia a ZP, por permitir que las fronteras españolas sean un verdadero coladero para la UE. ¡Ah! y adviértele a Paulino Rivero, que entre otros muchos cargos es el portavoz de CC en el Congreso, que no se le ocurra votar a favor de enviar tropas españolas a ninguna parte hasta que arreglen lo nuestro.

No vaya a hacer lo mismo que cuando votó a favor de la regularización general de inmigrantes ilegales en España, que llevó a cabo el gobierno socialista, y que fue la que disparó la actual avalancha de inmigrantes que estamos sufriendo en Canarias, debido al indudable efecto llamada que produjo, ante las quejas de la Unión Europea.

Mientras en España nadie hace nada, los inmigrantes siguen llegando a Canarias, cientos todos los días, miles todos los meses.

Y siguen muriendo, también a cientos, quizás a miles, ahogados, perdidos en el océano, deshidratados y desnutridos. Ante este aterrador drama humanitario, la gente se pregunta, ¿dónde están los nuestros? ¿Dónde están?

El presidente del Gobierno de Canarias, Adán Martín, el presidente del Parlamento canario, Gabriel Matos, y los Diputados y Senadores canarios? ¿Qué hace el único ministro canario, Juan Fernando López Aguilar?, ¿por qué no le cuenta a ZP lo que está pasando? ¿Y el delegado del Gobierno en Canarias, Pepe Segura, un experto que conoce perfectamente la situación y ha propuesto soluciones, por qué no le hacen caso? ¿Dónde está la UE, y la ONU? ¿Dónde?

Yo, visto lo visto, prefiero que me traten como al Líbano.

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