Madrid. El Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales y varias ONG acordaron ayer establecer una “estructura estable” para acoger a inmigrantes trasladados de Canarias a la península y duplicar las mil plazas de las que disponen para ese fin.

Tras reunirse con las ONG que llevan a cabo desde enero de 2005 el Programa de Acogida Humanitaria de inmigrantes desplazados de Canarias – fecha desde la cual se han trasladado a unas 15.500 personas – , el ministro Jesús Caldera explicó que el 83% de los trasladados han sido acogidos por ONG y el resto por las comunidades autónomas. Según Caldera, estas ONG dispondrán de la ayuda económica que precisen para hacer frente al incremento de plazas. De confirmarse estos datos, se duplicarían igualmente los 6,5 millones de euros que presupuestó el Gobierno este año de manera extraordinaria para responder a la crisis.

fórmulas para regularizar Hasta la fecha, estas organizaciones han atendido a 9.800 personas – de forma rotatoria, dado que estas personas no permanecen de forma indefinida – , y “acogerán a todas las que sean necesarias”, agregó el ministro. Caldera, recordó que la llegada de subsaharianos se produce desde 1998 y que en 2003 ascendieron a 20.000, mientras que en lo que va de 2006 suman alrededor de 21.000, una cifra que supera a la de todo 2005. Ayer llegaron más de medio millar en, al menos, seis cayucos.

Los inmigrantes sólo pueden estar internados en centros 40 días, después deben ser repatriados, pero no siempre ocurre así. Por ello, las ONG volvieron a reclamar fórmulas legales para que estas personas se documenten por motivos humanitarios y se integren en la sociedad.

El presidente del Gobierno de Canarias, Adán Martín (CC), y los líderes del PP en Canarias, José Manuel Soria, y del PSC – PSOE, Juan Carlos Alemán, no llegaron ayer a acuerdo alguno sobre inmigración durante un pleno del Parlamento canario en el que se hicieron continuos reproches. Adán Martín preguntó “cuántas víctimas más” serán necesarias para que España y Europa se convenzan de que el problema afecta a todos, e insistió en criticar a los sucesivos gobiernos españoles por no actuar en esta materia.

El portavoz del PSOE, Diego López Garrido, confió en que el Gobierno controlará los cayucos como ya lo hizo con las avalanchas en Ceuta y Melilla. El portavoz del PP, Eduardo Zaplana, cree, sin embargo, que el Gobierno llega tarde. >agencias