Los últimos documentos políticos de PP y Vox defienden las mismas ideas en migración, economía y vivienda

Migración, impuestos, vivienda, energía nuclear y gestión de la administración pública son algunas de las materias en las que PP y Vox utilizan incluso las mismas expresiones.

Público, Jose Carmona, 01-07-2025

“Tiene algún asesor que le ha dicho: hay que quitar el discurso a Vox”. Así se refería Santiago Abascal hace unas semanas a la estrategia adoptada por el Partido Popular de Alberto Núñez Feijóo. La radicalización del PP no pasa inadvertida para nadie y mientras la oposición espera que el Gobierno caiga o adelante elecciones, a su vez pelea intelectualmente por quedarse al votante más radical. Vox dice las cosas en voz alta y de forma agresiva y el PP prefiere susurrarlas con buenos modales, pero ambas formaciones defienden los mismos posicionamientos en varias cuestiones fundamentales.

El pasado domingo, Vox celebró su Asamblea Nacional y dio a conocer un documento político en el que presentaba sus planes para afrontar el problema de la vivienda en España y dibujaba su propuesta económica para el país. El documento de 26 folios, centrado en cargar contra las personas migrantes y culparlas de los males que adolecen España, demostró una vez más los enormes parecidos semánticos e ideológicos que tiene con el Partido Popular. Los de Feijóo publicaron hace dos semanas un documento político, que será aprobado en el Congreso Nacional del 4, 5 y 6 de julio, donde también dejaron ver su línea de acción en caso de gobernar. La realidad es que ambos escritos guardan importantes puntos en común.

En varias ocasiones, la propuesta de PP y Vox solo difiere en el tono, pero no en su fondo. Mientras que los de Abascal consolidan su lenguaje agresivo, los populares optan por un lenguaje menos violento, aunque con un enfoque político similar a la extrema derecha. Migración, impuestos, vivienda, energía nuclear y gestión de la administración pública son algunas de las materias en las que PP y Vox utilizan incluso las mismas expresiones.

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MADRID, 29/06/2025.- El líder de Vox, Santiago Abascal (5i), junto a miembros de su partido, clausura este domingo en Madrid la Asamblea General de la formación en un acto público en el que también se ha presentado el programa económico y de vivienda de la formación.
El líder de Vox, Santiago Abascal (5i), junto a miembros de su partido, clausura este domingo en Madrid la Asamblea General.EFE/ J.P
Administración pública
Como si se hubieran copiado los unos a los otros, PP y Vox tienen exactamente la misma propuesta, con las mismas palabras y la misma expresión, a la hora de afrontar la gestión de la Administración Pública. El PP fue claro sobre la burocracia, la que considera excesiva y aboga por minimizar: “Por cada nueva regulación que se apruebe, suprimiremos tres”, aseguran en su ponencia política. Esa misma idea es la que defiende Vox para mejorar la eficiencia del sector público: “Derogar tres normas por cada una que se apruebe”, puede leerse en el texto.

Esta propuesta no es la única que se repite casi palabra por palabra en ambos documentos. Los dos defienden también que el ciudadano se imponga al Estado y están a favor de imponer el “silencio administrativo positivo” para que, en caso de querer hacer algo, si el Estado no responde a la petición, la petición se dé automáticamente por buena. El PP lo propone para hacer negocio con la vivienda (para la “obtención de licencias de edificación”) y Vox, de forma más amplia, para “todas las relaciones entre la Administración y los ciudadanos”.

Migración
No es una sorpresa encontrar similutudes entre PP y Vox en cuestiones de política migratoria. Si bien la ultraderecha utiliza un lenguaje mucho más belicista contra las personas migrantes, (“las políticas pro inmigración masiva han generado un daño transversal a toda la economía española”, reza el documento), el fondo de ambas formaciones es el mismo.

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El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo (i) y el ex presidente del Gobierno Mariano Rajoy (d) durante el Foro Grupo Libertad y Democracia, en el Ateneo de Madrid, a 21 de mayo de 2025, en Madrid (España).
Los de Abascal piden de forma explícita “deportaciones masivas” y “tramitar de forma preferente y urgente la inmediata expulsión de todos los inmigrantes que accedan ilegalmente a nuestra nación, de aquellos inmigrantes legales que cometan delitos graves o hagan del delito leve su forma de vida, así como de aquellos que decidan no integrarse”. El PP lo reviste de un enfoque práctico, pero aboga porque “la irregularidad no puede generar derechos”, por “repatriar de inmediato a los inmigrantes ilegales y a quienes cometan algún delito” y condicionar la presencia de migrantes en España a “la contribución efectiva al sistema de Seguridad Social, al conocimiento del idioma y de la cultura españolas”.

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Vox está en el ojo del huracán por presunta financiación irregular. Las sospechas se centran en un polémico préstamo de 9,2 millones de euros otorgado por un banco húngaro vinculado al Gobierno de Viktor Orbán, lo que podría violar la ley española de financiación de partidos.

En este artículo desgranamos todas las claves de este caso que sacude a la ultraderecha española, sus implicaciones políticas y las tensiones internas que amenazan la estabilidad del partido.

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Vivienda
Para solucionar el problema de la vivienda, PP y Vox abogan por la misma receta. Los de Abascal piden una “ampliación de suelo disponible” y la “derogación de todas las medidas intervencionistas en el mercado de alquileres y política”. Esa es la misma propuesta que el PP, que apuesta por “acelerar la construcción de nuevas viviendas para aumentar rápidamente la oferta disponible” y llama a huir de “normativas intervencionistas”. Una vez más, las mismas ideas con diferente vestimenta.

Además, la única legislación que proponen los dos partidos es para frenar la okupación, un problema que solo afecta al 0,05% de la población. Vox propone “mano dura con la okupación y la inquiocupación” como solución al problema de la vivienda, una fórmula que también aparece entre el ideario del PP: “Nuestra prioridad es acabar con estos comportamientos incívicos endureciendo las penas, impidiendo a los ocupas empadronarse y agilizando el desalojo”, explican.

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Impuestos
Una nación libre de impuestos, eso es lo que quieren Vox y Partido Popular, que no explican cómo financiarían la sanidad y la educación pública. La ultraderecha propone “reformar totalmente el sistema de tributación sobre la renta” y “reducir el impuesto de sociedades que pasará del 25% actual a un tipo del 15%”. Sin profundizar, aseguran también que si gobieran eximirán del pago de impuestos a “todo el ahorro personal orientado a la jubilación, sin límite cuantitativo y condicionado a su cobro tras jubilarse”.

El Partido Popular propone, en esencia, lo mismo, aunque no llega tan al fondo en cuestiones concretas. La formación se limita en su ponencia política a defender “impuestos bajos para todos” y promete " darle la vuelta a la relación entre el contribuyente y la Administración tributaria".

Nucleares
No es ninguna sorpresa que la derecha hace una pelea abierta de la energía nuclear. A pesar de los intentos de desescalar y reducir su consumo debido a su peligrosidad, su contaminación, sus residuos y su alto coste, PP y Vox hacen una defensa abierta del sector que va desde las cámaras autonómicas hasta el Europarlamento.

Vox tiene una propuesta algo más radical, puesto que ni menciona en su documento las energías renovables, y aboga por “recuperar el plan nuclear nacional” que pasa por promover “estudios urgentes para instalar centrales nucleares en los emplazamientos disponibles adyacentes a las actuales”. Aunque las centrales nucleares en España tienen programado su cese definitivo de actividad para 2035, eso no impide que la derecha mantenga el pulso. En este sentido, el Partido Popular está en el mismo barco, dado que apoya “la prórroga de la nuclear” por cuestiones puramente económicas.

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