El PSOE y el PNV ya no ocultan sus “desconfianzas” y el secretario general de los socialistas vascos Eneko Andueza ha mostrado sus “dudas” sobre la apuesta del partido de Aitor Esteban por mantener su pacto de gobierno. La tensión política entre los dos partidos llega a su cenit después de nueve años cogobernando en Euskadi mientras el PNV mantiene en La Moncloa a Pedro Sánchez. La dirección de Esteban ha tachado de “provocaciones” las últimas declaraciones de su socio en las instituciones vascas.

“No sé si tienen muchas ganas de seguir gobernando con nosotros o no, porque al final también surgen dudas y desconfianza”, ha advertido Eneko Andueza en una espiral de acusaciones entre PNV y el PSOE que se inició cuando el lehendakari Imanol Pradales insinuó la necesidad de filtrar la llegada de inmigrantes en función de las necesidades de la economía vasca. El posicionamiento de Pradales fue duramente criticado por la delegada del Gobierno Marisol Garmendia que, añadió su malestar por la última pataleta de los nacionalistas contra un centro para 350 refugiados que se ultima en el barrio vitoriano de Arana.

Los últimos coletazos del notable distenciamiento entre los socios de gobierno lo ha protagonizado Eneko Andueza ante las cámaras de EiTB. El líder de los socialistas ha evidenciado su malestar por la versión dada ayer por la portavoz María Ubarretxena que, tras la reunión ordinaria del consejo de gobierno, reconoció que se abordó el debate sobre la inmigración pero sin aclarar que los consejeros socialistas habían defendido sus posiciones ante Pradales.

Andueza, que no quiso ser vicelehendakari para mantener un discurso propio como líder del PSE-EE, asegura que no está dispuesto a callarse. De hecho, lo dejó en evidencia el 14 de abril a Pradales cuando anunció que le había dado un “tirón de orejas” por las declaraciones del lehendakari a favor de la conexión ferroviaria de la Y vasca con Pamplona a través de Ezkio-Itxaso (Guipúzcoa). Pero los desacuerdos entre ambos socios se han multiplicado en las últimas semanas.

Los socialistas reconocieron que desconocían la posición crítica del Gobierno vasco con el decreto de universidades privadas elaborado por el gabinente de Pedro Sánchez. La política migratoria junto al controvertido macrocentro para refugiados en Vitoria se ha convertido en el último campo de batalla entre el PNV de Esteban y el PSOE vasco de Andueza. “El PNV no cuestiona la coalición de Gobierno. Es Eneko Andueza quien ha empleado términos como deslealtad o desconfianza”, ha respondido la dirección del nuevo presidente nacionalista.