Tras doce días de calvario, los tres polizones del barco atracado en el Puerto de Bilbao esperaban hasta ayer en las dependencias aduaneras de Santurtzi el dictamen del Juzgado Central de lo Contencioso – Administrativo de Madrid como única vía posible para entrar en el país. Pero un comunicado de la Subdelegación del Gobierno en Vizcaya dio un giro a la situación de los tres inmigrantes. La solicitud de admisión ‘por razones humanitarias’ planteada por la Comisión Española de Ayuda al refugiado, CEAR, ha sido aceptada y «probablemente los polizones pisarán suelo español la semana que viene», declaró ayer el subdelegado, Miguel Ángel Fernández, quien explicó que la medida no se materializará hasta mañana o el martes porque «todavía espera el resultado de dos informes que avalen la propuesta para conseguir que esté respaldada por la Ley». Fuentes de la Subdelegación explicaron a este periódico que «tras una dura semana buscando soluciones el Ejecutivo ha encontrado una interpretación jurídica que posibilita la entrada en el país de los polizones»

La resolución para poder tramitar el asilo político, que les mantiene desde el jueves en las dependencias del Puerto de Bilbao por orden del Juzgado Central de lo Contencioso – Administrativo de Madrid, podría llegar mañana, lo cual variaría el escenario que los polizones vislumbran en estos momentos. Si el dictamen judicial es favorable, la solución planteada ayer por el subdelegado perdería validez puesto que el viernes afirmó que «no iba a interponer ningún tipo de medida judicial a la resolución lanzada por el Juzgado de Madrid». Pero si por el contrario, se les deniega y en ese momento el barco aún no ha zarpado, la opción barajada hasta el momento, de que los polizones «embarquen de nuevo», no se llevará a cabo, pues la Subdelegación explicó ayer que «la concesión de entrar en España por razones humanitarias está hí y aunque hay matices no se va a revocar».

La Comisión Española de Ayuda al Refugiado, CEAR, manifestó su entusiasmo al conocer la noticia y declaró que es «un triunfo de la justicia y de la humanidad». El ‘Agiasma’, que no pudo zarpar el viernes debido a unas irregularidades técnicas que no consiguió resolver, partirá mañana hacia Rotterdam.