Tres personas han sido arrestadas entre las 125 que fueron rescatadas el domingo en el Mediterráneo central por el buque Aita Mari. Según han informado este lunes medios de comunicación italianos, están acusadas de traficar con personas y de ejercer violencia sexual. Se trata de dos jóvenes menores de 25 años y un tercer varón de 40, todos ellos de nacionalidad egipcia.

Las 125 personas desembarcadas este lunes en el puerto italiano de Catanaia fueron rescatadas de dos embarcaciones, 84 de ellas de un bote neumático y otras 41 de una embarcación de madera. Éste es el segundo rescate llevado a cabo por el Aita Mari este mes, después de que el pasado 5 de abril auxiliara a 108 personas que posteriormente trasladó al puerto italiano de Salerno.

En esta nueva operación que ha concluido hoy la colaboración entre las fuerzas del orden y los propios migrantes, víctimas de abusos económicos y físicos, ha sido determinante para poder identificar a los tres traficantes que, según informaron fuentes policiales, intentaron mezclarse durante las labores de desembarque entre el centenar de personas rescatadas en el Mediterráneo central.

La organización Salvamento Marítimo Humanitario (SMH) informó de que las personas auxiliadas se encontraban “en grave peligro” a bordo de las dos embarcaciones. Fue durante la madrugada del domingo cuando el pesquero reconvertido en nave de rescate fue alertado ante la crítica situación por la que atravesaba una embarcación de goma con el fondo roto y 84 personas a bordo.

Según explicó SMH en una nota, “tras dos horas de infructuosos avisos a las autoridades”, el Aita Mari localizó la embarcación de goma, aunque durante la operación de rescate una segunda nave de madera con otras 45 personas a bordo apareció en la zona.

No obstante, mientras 41 personas de este segundo bote eran transferidas al Aita Mari, las cuatro restantes pusieron en marcha los motores y abandonaron el lugar.

Entre las 125 personas rescatadas hay 106 adultos, de los cuales 96 son hombres y 10 mujeres, y 19 menores, 16 de ellos no acompañados. Dos de las mujeres están embarazadas. Estas personas proceden de Eritrea, Etiopía, Pakistán, Sudan, Egipto, Togo, Nigeria, Guinea Konakry, Camerún, Beni, Ghana y Níger.