El 24 de marzo, seis estudiantes, en su mayoría militantes de las organizaciones Contracorriente y el Sindicato de Estudiantes, junto a un trabajador de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), fueron citados por la Policía Nacional para prestar declaración. La comparecencia está relacionada con su participación en una manifestación pacífica el pasado 13 de febrero, en la que protestaban contra la presencia del exdiputado de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, en la Facultad de Ciencias Políticas del campus de Somosaguas. La denuncia, presentada por el colectivo de extrema derecha Libertad sin ira, les atribuye presuntos delitos de coacción, alteración del orden público y discurso de odio.

En respuesta, ambas organizaciones lanzaron una campaña este miércoles “en solidaridad con las estudiantes antifascistas perseguidas por su lucha contra la extrema derecha”. Mediante esta iniciativa, exigen el archivo de la causa abierta contra las siete estudiantes.

El manifiesto afirma: “La acusación de la Policía a nuestras compañeras es una auténtica barbaridad”. “Todo esto ocurre cuando, el 13 de febrero, decenas de ultraderechistas, algunos de ellos vinculados a los neonazis de Desokupa, se presentaron en la Facultad de Políticas con una actitud agresiva y hostil para llevar a cabo un acto que había sido previamente cancelado por las autoridades universitarias”, informan las organizaciones.

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“Centenares de estudiantes y profesores nos manifestamos en ese momento, ejerciendo nuestro legítimo derecho a la protesta pacífica, rechazando que el discurso de odio fascista, machista, racista y homófobo de la extrema derecha se extienda en la universidad”, continúa el comunicado.

“A pesar de la cancelación del acto, el exdiputado de Vox se presentó en la facultad acompañado de un equipo de seguridad privada y se enfrentó a las compañeras que encabezaban la protesta pacífica. El dirigente ultraderechista fue escoltado por la Policía durante su intervención, una fuerza policial que actúa bajo las órdenes directas del Gobierno del PSOE-Sumar y de su ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska”, recalcan los sindicatos estudiantiles.

Coral, una de las seis jóvenes que deberá presentarse en comisaría y militante del Sindicato de Estudiantes de la Complutense, manifiesta en declaraciones a Público su agradecimiento por la respuesta recibida: “En menos de ocho horas logramos más de 1.000 firmas”, dice y añade que su objetivo “es llegar a las 10.000”. La estudiante subraya que esta respuesta refleja la conciencia antifascista que prevalece en España, destacando el sentimiento de solidaridad y el compromiso de evitar que situaciones como esta se repitan.

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Coral (Sindicato de Estudiantes): “Organizaremos movilizaciones en todas las universidades convirtiéndolas en bastiones de lucha”

“La intención es que esto no se limite únicamente a una campaña de firmas o a un manifiesto en una página web, sino que llegue a todos a través de manifestaciones. Organizaremos movilizaciones en todas las universidades, convirtiéndolas en bastiones de lucha contra la extrema derecha”, concluye Coral.

Represión al movimiento estudiantil
Tras estos hechos, la agrupación de extrema derecha Libertad sin ira presentó una denuncia ante la Policía. “Con notable rapidez, la Brigada de Información tramitó la denuncia y citó a determinadas compañeras para declarar”, reza el manifiesto de las estudiantes. “¿La razón? Ser militantes del movimiento estudiantil y haber realizado varios vídeos públicos en los que narraban los hechos protagonizados por estos grupos fascistas”, explican.

Sindicatos estudiantiles: “Este ataque no es un hecho aislado. Forma parte de una ofensiva represiva contra el movimiento estudiantil”

“Este ataque no es un hecho aislado. Forma parte de una ofensiva represiva contra el movimiento estudiantil y la juventud. Al igual que los expedientes abiertos contra las estudiantes que protestaron contra el genocidio sionista al pueblo palestino, o la represión y detención de los estudiantes que se manifestaron contra la presencia de la extrema derecha en las universidades de Granada o Barcelona”, aseguran las organizaciones.

“Es evidente que con este caso pretenden montar un proceso judicial y policial para generar miedo, no solo entre el movimiento estudiantil, que hoy también lucha en defensa de la universidad pública, sino entre toda la clase trabajadora, las mujeres, las personas migrantes, el colectivo LGTBIQ+ y la izquierda combativa”, añaden. “¡Basta de represión al movimiento estudiantil! ¡Si tocan a una, nos tocan a todas! ¡Siempre antifascistas!”, concluye el comunicado, haciendo un llamado a que los firmantes de la campaña manifiesten su apoyo a las estudiantes represaliadas.

Las estudiantes están a la espera de recibir las fechas de las citaciones para declarar, que, según ha informado Coral, una de las afectadas, a este medio, creen que se programarán para este mes de abril.