Castilla-La Mancha quiere ser solidaria en el mecanismo para la reubicación de los menores migrantes no acompañados, pero no admite lecciones de solidaridad ni de quienes pactan con Vox, con la extrema derecha, ni de aquellos que lo hacen “con un supremacista identitario como es Puigdemont”.

Así lo ha señalado el jefe del Ejecutivo autonómico, Emiliano García-Page, en declaraciones a los medios de comunicación en la localidad conquense de Mira, donde ha presidido la reunión de la comisión de coordinación para la recuperación de este municipio, afectado por la DANA del pasado 29 de octubre.

Preguntado por el decreto que este martes aprueba el Consejo de Ministros para modificar la ley de extranjería con el objetivo de articular un mecanismo permanente para reubicar a los menores migrantes desde zonas tensionadas a otras comunidades autónomas, Page ha señalado que se está estudiando el documento, aunque no ha confirmado aún si habrá o no recurso, aunque considera “insultante” el acuerdo que ha llevado a él.

Documento que se irá viendo, “paso a paso”, y aunque por delante va la disposición a ser solidarios, “no vamos a omitir ningún tipo de reproche” ha advertido, menos ante el “tufillo” de que se vaya a “utilizar a los migrantes y menores como arma arrojadiza en España”, algo que considera “patético” y “muy grave”. En este sentido, ha añadido que desde Castilla-La Mancha “solidarios sí, tontos no”.

Y es que para el presidente de Castilla-La Mancha, “salta a la vista” que el Gobierno no tiene política de inmigración y que “todo son parches sobre la marcha”.

Muestra de ello, ha recordado, el reciente intento de “hacer un campamento, al estilo Meloni, en el aeropuerto de Ciudad Real”, y ahora ha precisado “estamos hablando de los mismos responsables”.

El Gobierno descarta instalar el centro de acogida de migrantes en el aeropuerto de Ciudad Real
De esta forma, y unido al hecho de que tanto la estrategia como las competencias migratorias y de fronteras se estén pactando “con un reconocido movimiento político y con una personalidad claramente supremacista identitaria”, García-Page tiene claro que esto “no puede acabar nunca bien”, ni a medio ni a largo plazo, ya que “se dinamitan” todas las opciones de cualquier pacto de Estado.

“Vamos a ser solidarios, queremos ser solidarios”, ha señalado el presidente autonómico antes de recordar el ofrecimiento realizado al gobierno de Canarias para poner a su disposición las plazas vacantes, pero “no nos va a dar lecciones de solidaridad alguien como Puigdemont” que viene de “obligar al Gobierno de España” el cual “a veces olvida que es progresista”, ha apostillado, a pactar el impuesto a la banca.