Día importante para el pueblo saharaui el de este martes en el Congreso de los Diputados. La cámara debatirá la admisión a trámite de una proposición de ley del Grupo Plurinacional Sumar para otorgar la nacionalidad española a los saharauis nacidos bajo la Administración española y, también, a sus descendientes en primer grado de consanguinidad. Según ha podido saber Público, la iniciativa no corre peligro, aunque no parece que vaya a ser gracias al respaldo del Partido Socialista.

Lo cierto es que ya durante la legislatura pasada el Congreso llegó al mismo punto al que llegará este martes. En aquel caso fue Unidas Podemos quien defendió la propuesta y el Partido Socialista, la única formación del hemiciclo que se opuso. Los socialistas argumentaron que, pese a compartir que existe un agravio entre los ciudadanos saharauis y los de otras excolonias a la hora de obtener la nacionalidad, no compartía “el diseño” del procedimiento que hizo Unidas Podemos.

“El camino correcto es igualar procesos, no crear procesos exprés para situaciones análogas”, explicó el diputado Sergio Gutiérrez. Es algo que, en cualquier caso, los defensores de la iniciativa entendieron como excusa por parte del PSOE.

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Las fuentes consultadas por Público del Grupo Socialista en la Cámara Baja no aclaran cuál será el sentido de su voto en esta ocasión. “Aún tenemos que terminar de estudiar el asunto”, aclara un diputado. Y ese estudio no se está llevando a cabo únicamente dentro del grupo parlamentario, sino que también están interviniendo expertos de los ministerios de Exteriores y Justicia. En concreto, los dos elementos que no convencen a los socialistas son que el procedimiento que contempla la ley para la concesión de la nacionalidad a los saharauis sea la carta de naturaleza y que uno de los medios probatorios que se puedan utilizar para acreditar la condición de saharaui sea un certificado de nacimiento en los campos de refugiados de Tinduf y legalizado por el Frente Polisario. Los mismos que hace dos años.

Las voces de otros partidos con las que ha hablado este medio —entre ellas, de Sumar o, incluso, del PP— no creen que el PSOE vaya a cambiar de posición. Con todo, los socialistas aclaran que no confirmarán su posición hasta este martes.

Tesh Sidi, la diputada de Sumar por Más Madrid que intervendrá en el debate, asume que el PSOE “seguira en las mismas” e insiste, en conversación con Público, en que los socialistas deberían entender que “con esta proposición de ley estamos hablando de derechos humanos y no de política exterior”. Hace referencia, así, a que no se debería interpretar un voto socialista como un elemento a tener en cuenta en las relaciones entre el Gobierno español y Marruecos.

Para Sidi —nacida en los campamentos de refugiados de Tinduf y nacionalizada española después de un eterno y tortuoso proceso que lucha, con esta ley, por aligerar y naturalizar— “lo más interesante de la norma no es tanto que devuelva la nacionalidad a las personas que nacieron en territorios saharauis bajo la Administración española por memoria restaurativa”, sino que “iguala los derechos de los saharauis a los ciudadanos de todos los países de las excolonias españolas”.

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Tesh Sidi, diputada de Más Madrid y Sumar en el Congreso.
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En resumidas cuentas, la ley permitirá a los nacidios en el Sáhara Occidental antes del 26 de febrero de 1976 solicitar la nacionalidad española por carta de naturaleza en los dos años posteriores a la aplicación de la norma acreditando algunas de las pruebas que contempla la norma —DNI español de aquel momento, aunque estuviera caducado; certificado para el censo del referéndum de la ONU; certificado de los campos de refugiados de Tinduf; partida de nacimiento; libro de familia u otros— y a los familiares de primer grado de consanguineidad, que tendrán cinco años para solicitar la nacionaliad.

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Además, el texto incluye una reforma del Código Civil, en concreto de su artículo 22. La modificación consiste en añadir el pueblo saharaui a a la lista de grupos de población que solo tiene que demostrar una residencia en España de dos años para obtener la nacionalidad, en lugar de los diez años que tienen que demostrar los saharauis en la actualidad. Así, se igualaría al pueblo saharaui con los países iberoamericanos, Andorra, Filipinas, Guinea Ecuatorial o Portugal o los sefardíes.

Durante la mañana de este lunes, Izquierda Unida, que participó muy activamente en el registro de la iniciativa, ha hecho un llamamiento al PSOE para que apoye la proposición.

El PP votará a favor
Si la postura del PSOE es una incógnita, la del PP, en principio, no ofrecerá sorpresas. Los populares ya votaron a favor de la iniciativa en la legislatura pasada y no se plantean una postura distinta a la defendida hace dos años, según han asegurado fuentes del grupo a este medio. Los de Feijóo declaran tener “sensibilidad con este proceso inconcluso” y critican al PSOE “por no encabezar la iniciativa”, que, a fin de cuentas, definen como “una pequeña modificación legislativa”.

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Quien intervendrá desde la tribuna será, si no hay cambios, Carmelo Barrio, un reconocido activista por los derechos del pueblo saharaui, que en más de una ocasión ha defendido los intereses del mismo junto a diputados del PSOE —tal y como ha explicado varias veces— y que critica el “viraje de Sánchez”, que, según Barrio, ha dejado descolocados a muchos socialistas.

Con todo, la toma en consideración de la iniciativa saldrá adelante. No se espera ningún cambio por parte del resto de grupos de la Cámara, que la respaldarán. En la legislatura pasada, además del voto en contra del PSOE, solo Vox se abstuvo.