EDITORIAL

La inmigración, sin respuesta europea

El Consejo de Ministros puso ayer fin al veraneo oficial del Gobierno y también de la oposición, este año acaso tan esfumada como los miembros del Ejecutivo, pese a los graves problemas vividos estas semanas

Diario de Navarra, 26-08-2006

EL Consejo de Ministros habido ayer puso término a las vacaciones del Gobierno y, de algún modo, al descanso político.

Hasta los exégetas más fervorosos de las maneras gubernamentales tendrán que admitir que el balance del verano ministerial tiene a cero, salvo, como de costumbre, el ir y venir de la vicepresidenta, alguna ráfaga de Pérez Rubalcaba, algún mutis racheado del titular de Defensa y la desventurada participación verbal de la ministra de Medio Ambiente en los incendios de Galicia, como si las llamas no fueran calamidad suficiente, incluso para una población acostumbrada, sin que fuera nadie a atizarlas. Y el silencio de la oposición no ha sido menor. Los ciudadanos agradecen, a buen seguro, que sus gobernantes no les amarguen las vacaciones, pero no parece menos cierto que algunos de los problemas y situaciones vividas permitiesen la ausencia pública de quienes, a una con el cargo, deben cargar con la obligación de informar e intentar poner serenidad en la vida colectiva. Los incendios y los cayucos africanos y el Líbano exigían otro tipo de noticias y declaraciones oficiales.Ayer, Fernández de la Vega, tras la reunión del Gabinete, habló del muy considerable problema de los inmigrantes que llegan a decenas de miles. Conviene no ofuscarse y limitar la cuestión a las costas canarias. El Gobierno puede desgranar todas las fechas y reuniones habidas y por haber sobre este asunto en el ámbito de la UE, incluso puede echar la culpa a que Francia y Holanda abortasen la Constitución, pero la evidencia es que el silencio y la abstención de Europa acentúan la soledad de España en esta crisis. La misión «de urgencia» ha tardado tres meses en llegar y sirve de poco. Aparte de respaldos grandilocuentes, la verdadera respuesta práctica está por llegar. Quizá debamos preguntar por qué.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)