Tras la Guerra Civil española más de 7.000 personas se vieron obligadas a echarse al monte para sobrevivir a un régimen dictatorial sediento de venganza. Entre ellos se encontraban Sixto García Espinosa, alias el de Marchena, José Antonio Fernández, alias el de Miller y Juan Ruiz, exalcalde republicano de Yeste (Albacete), alias el argentino, que sobrevivieron durante once años en la jiennense Sierra de Segura, un lugar muy abrupto y de clima extremo, para acabar siendo finalmente tratados como alimañas.

Maquis y fugaos en la Sierra de Segura es el título del documental que acaba de estrenarse dirigido por el cineasta y documentalista José Laso Flores y que narra la odisea de una partida de maquis, “fugaos” o “buscaos” por los montes escarpados del municipio más extenso del parque natural de Cazorla, Segura y Las Villas.

La película documental recrea una historia real que trascurre en los años 40 por el valle del río Segura y Zumeta, de Santiago-Pontones (Jaen) y también por el término municipal de Yeste (Albacete). Un episodio marcado por la represión en la España profunda de posguerra y que durante décadas permaneció en silencio por miedo a represalias.

La película está interpretada por actores locales de teatro y cortometrajes, y cuenta con testimonios de mayores que vivieron de primera mano esta traumática etapa de la historia. “Es un trabajo de memoria histórica realizado en comunidad con los objetivos de dignificar la figura de hombres y mujeres que se enfrentaron al régimen dictatorial y fueron represaliados”, señala José Laso, cuyo libro La sierra profunda, desconocida y olvidada ha inspirado el rodaje de este film. “Me di cuenta de que la figura de los ‘fugaos’ era muy común y era un tabú hablar de ellos por miedo a represalias para aquellos que vivían por estas sierras en la posguerra”, explica el artífice de este proyecto cinematográfico.

Durante los años 40, en la provincia de Jaén existían cinco partidas de maquis localizadas en la Sierra Sur, Sierra Morena, Sierra Mágina, incursiones de la partida del Rojo Terrinches y las sierras de Cazorla y Segura. Aunque esta película recrea la historia de Sixto García Espinosa, el de Marchena, fugado del campo de prisioneros de Guadarrama (Madrid); José Antonio Fernández Martínez, el de Miller, escapado de las dependencias carcelarias de Santiago de la Espada (Jaén); y Juan Ruiz González, el exalcalde republicano de Yeste (Albacete), que se había escapado del campo de concentración de Portaceli (Valencia).

Todos ellos fueron perseguidos durante 11 años (de 1939 a 1950) y sufrieron el acoso y la represión hasta la muerte por haber luchado junto al ejército republicano, haber desertado del ejército o por escaparse de campos de trabajo del régimen franquista. Estos ‘fugaos’ se refugiaban en cuevas, cortijos, tinadas de ovejas, viviendas familiares o de simpatizantes con la causa, y a veces eran socorridos por pastores, cortijeros, arrieros, recoveros, gitanos, pineros o gancheros, pero si estos colaboradores eran descubiertos se arriesgaban a recibir palizas, terminar en la cárcel o la propia muerte.

“En este tiempo de quimeras y cuestionamientos sobre la memoria histórica este documental va a suponer un legado valioso, una aportación que hace justicia a quienes no tuvieron otras salidas que sobrevivir o morir, siendo tachados de bandoleros o criminales, delatados, perseguidos y fusilados”, señala el director del documental. Un proyecto que ha sido posible gracias el arduo empeño de José Laso al frente de la Asociación Cultural Amigos de Nuestras Tradiciones ‘La Esparteña’, junto al Grupo de Teatro Artemix de Santiago-Pontones, Joaquín Castillo como operador de drones, y actores y actrices de cortos de esta comarca jiennense, como José Lara, que ha alternado su incursión en el mundo del cine con su negocio de reparto de pan por todos los núcleos habitados de estas sierras.

El rodaje ha tenido lugar en las distintas aldeas de donde procedían los maquis, como Marchena, Miller o La Toba, y en otros parajes serranos como Río Madera o el pantano de El Tranco. Y muchas de las escenas interiores se han rodado en el Ecomuseo Alma Serrana de la aldea de Los Anchos, un lugar que Laso creó en 2002 con el objetivo de recopilar y poner en valor el patrimonio natural y cultural de la Sierra de Segura y también todo lo relacionado con un modo de vida muy ligado a la naturaleza y al aprovechamiento de sus recursos endógenos.

Pero, al mismo tiempo, la película-documental va más allá del séptimo arte y aspira a retratar la cultura y etnografía del interior de la Sierra de Segura, poner en valor su rico patrimonio histórico y natural y, de alguna manera, trabajar metodologías participativas en la España vaciada que ayuden a paliar la despoblación en uno de los municipios con mayor sangría demográfica en Andalucía. Los promotores de esta iniciativa quieren que este documental sea la punta de lanza del proyecto Santiago-Pontones de Cine, que nace para divulgar eventos, proyectos e iniciativas locales de interés turístico cultural.

“Lo que queremos es visibilizar el rico patrimonio histórico-cultural, medioambiental y etnográfico de este municipio y posicionarlo como plataforma del mundo del cine y, al mismo tiempo, luchar contra la despoblación, el principal desafío de este municipio que cuenta con una población diseminada en 80 pequeños núcleos”, indica la concejala local de Turismo, Mari Luz Castillo, que es también una de las actrices que ha participado en el rodaje. Santiago-Pontones ya acogió en 2021 el rodaje de La hija dirigida por Manuel Martín Cuenca y con Javier Gutiérrez y Patricia López Arnaiz entre los principales protagonistas.